Entrevistas con…

 Ferran Adrià, chef internacional
 


http://www.ivoox.com/playerivoox_ee_1813671_1.html

Entrevista publicada en http://www.inforadioucm.es y http://www.ccinf.es/infoactualidad

Ainhoa Goñi, directora de Comunicación del CSIC

Una de las ramas con más proyección y atracción informativa esta siendo el periodismo científico de corte divulgativo. A la directora de comunicación del CSIM le atrajo siempre ésta materia ya que disfrutaba con las matemáticas en el Colegio y con optativas como Periodismo ambiental en la Universidad. Pero no fue hasta que accedió a una beca de periodismo científico de EFE y CSIC donde se dio cuenta que esta era su verdadera pasión: “una amiga me dijo que era algo interesante y que enganchaba. 3 meses después estaba encantada y 6 meses después sabía que quería dedicarme a ello” confiesa la navarra.

Para ella, un periodista científico debe “tener mucha curiosidad y ver un poquito más allá, por lo que se convierte en un enganche”. Es muy importante ver distintos momentos en los que tratas una nota de prensa y te das cuenta que hay temas que cambian el mundo: “encontrar la vacuna del VHI o trabajar con vacunas de la malaria son hechos que se dan una vez en la vida” afirma Goñi, con una orgullosa sonrisa.

Recomienda a todos los interesados en la materia a empezar leyendo revistas científicas como Science o Nature ya que es importante la documentación dentro de un periodismo – el científico- en el que arriesgarse es más complicado que en otros siendo ese el reto. Periodistas científicos y buenos hay muy pocos y son fruto de preparación y años. Ella recuerda el primer texto científico que leyó en ingles de temas relacionados con la física básica “como algo verdaderamente complicado”, pero “de todo se aprende” declara Goñi.

La clave en un periodista científico es saber divulgar la información, siendo simplemente un buen periodista. Y divulgar para Goñi “es contar las cosas de forma sencilla, es lo que se dice ahora: divulgar la ciencia a todos los públicos”. La periodista reconoce que, “gracias a la mezcla entre los medios tradicionales y un mundo de nuevos formatos con las redes sociales como twitter, blogs y un montón de paginas relacionadas con la ciencia, el interés ha crecido y la gente cada vez es más consciente de la necesidad de la ciencia”.

Las innovaciones han marcado mucho el día a día del periodismo científico. “Cuando yo llegué a este mundillo las llamadas a esta oficina por ejemplo eran un par de llamadas al día y hoy en día recibimos 50” subraya la dircom del CSIM.
Innovaciones como que “donde hace unos años tenías un texto en inglés o el paper directamente hoy tienes todo: la nota de prensa en todos los idiomas, pocas, fotos, videos o  el poder hablar hoy en día por Skype que está muy generalizado, programa a través del cual mantengo contacto con investigadores nuestros que están en cualquier parte del mundo” son prueba de ello.

La convivencia de una periodista rodeada de cientos de investigadores no es ni mucho menos un problema para ella: “es un mundo -el científico- con sus normas igual que las que tenemos los periodistas, pero es sencillo” afirma Goñi. Los propios investigadores no se han sentido obligados sino que han visto la necesidad e importancia de comunicar sus estudios a través de distintas plataformas. 

Todo esto hace que no sea difícil colocar noticias de ciencia en los medios como nos cuenta la entrevistada: “depende del tema, es decir no del área de la investigación sino verdaderamente del descubrimiento: un temazo va a ser siempre un temazo”. Goñi lamenta que antes, cuando se recurrían a temas científicos, era solo para tratar temas graves: un vertido, un volcán, la crisis del pepino, etc. algo que poco a poco está cambiando con temas más “amables” en medios que dedican espacios concretos a la ciencia.
Es tajante al afirmar que los recortes no han  afectado a la comunicación del CSIC, la parte que le toca pero entiende que la situación es complicada lo que ha provocado un descenso desde 2010, en general, en los presupuestos en ciencia y entre ellos en el CSIC: “se ha pasado de un 13% a un 5% y este año tenemos 4,3%”.

Sede madrileña del CSIC
La portavoz del CSIC cuenta que la institución que representa seguirá tratando todas las ciencias, todas las disciplinas potenciando líneas de investigación como temas de enfermedades relacionadas con el envejecimiento: “la población vive más años y tienen enfermedades relacionadas con la edad como el Alzheimer, Parkinson además de temas como el cáncer o el cambio climático”. No se olvida del proyecto Malaespina, el mayor en el campo de la Oceanografía en España, con el que “aportamos nuestro granito de arena en esta materia” dice Goñi o el reciente estudio sobre osos polares, del que se hizo eco Science: “una publicación muy interesante que demuestra que la ciencia avanza y cambia teorías constantemente”.

Orgullosa se siente de trabajar en lo que le gusta, en la ciencia y en un país que “se sitúa a nivel mundial en el 9º lugar” y que ha exportado a grandes nombres como Pedro Alonso con temas de Malaria entre África y Barcelona, Juan Massaget dirigiendo un centro muy potente en EEUU o Ignacio Chirac como director de uno de los centros de Max Plan, homologo del CSIC en Alemania.
  

Carlos del Amor, periodista

Siendo de Murcia, ¿Dónde quedó ese acento?
Nunca he tenido mucho acento. Cada uno tiene el acento de donde es. Sobre todo es que también la mitad de mi familia es de Madrid y supongo que en casa oí hablar en otros acentos. Dicen que de vez en cuando me sale y está bien que salga porque uno es de donde es.

¿Por qué ser periodista? ¿Es vocacional?
Si es vocacional, totalmente vocacional. Es lo que me había gustado siempre, lo que me apetecía hacer desde el principio. Me apetecía contar historias y el periodismo es la profesión que te permite conocer una historia, conocer una cosa y contársela a la gente. Cuando me preguntaban qué quieres ser de mayor yo siempre dije periodista.

¿Cómo fue su camino hasta llegar aquí, al ente público?
Siempre he estado en Televisión Española, desde que empecé. No había terminado la carrera y me contrataron en prácticas en TVE en Murcia donde hice las prácticas de verano. Luego me contrataron justo antes de terminar las practicas de verano, compaginé el final de la carrera con eso estando 4 años en el Centro Territorial de Murcia que es como hacer la “mili” porque haces de todo, te dejan experimentar con todo y  te lo pasas muy bien siendo años en los que yo he aprendido casi todo lo que sé. Luego me llamaron de Madrid que es como la Champions para el periodista el telediario es como jugar en el Bernabéu, en el Nou Camp es lo máximo. Y aquí pues sigo, aprendiendo. Llevo 7 años aquí y sigo aprendiendo.

¿Cómo fue esa llamada para venir a Madrid? ¿Qué sintió?
Se me acabó un contrato en Murcia, estuve 3 meses parado. Iba a volver a renovar en Murcia, tenía alguna oferta de alguna cadena privada en Murcia pero justo me llamaron de aquí, que había un hueco en cultura que es la parcela en la que he estado casi siempre. Así fue como la dirección me llamó y yo me entusiasmé, ante la posibilidad que se abría una nueva perspectiva en mi profesión. Es jugar en un equipo grande, grande, grande y encima hacer lo que te gusta. Era una cuadratura de círculo aquello.

Ese estilo a veces ornamental, subjetivo y literario no gusta tanto a los más puristas… ¿Qué busca con cada reportaje, entrevista o crónica?
No sé si a los más puristas les gusta o no les gusta. Hay gente muy purista que me ha dado la enhorabuena por mis reportajes y gente que no.
Pero desde el mismo momento que haces algo y es público es obvio que no puede gustar a todo el mundo y además si te empeñas en gustarle a todo el mundo al final no te gustas a ti mismo. Lo que tiene que gustarte es lo que haces e intentar contarlo de la manera que crees que debes contarlo. Yo siempre he tenido un estilo -dice la gente que es diferente, peculiar, bajo otra mirada- así que bueno. Que me digan también los puristas cual es el estilo, a lo mejor ellos tienen la pócima mágica para saber un estilo que guste al 100% de la gente. Yo lo que sé es que cuento cosas, informo de las cosas, doy datos de las cosas y lo intento hacer todo sabiendo que trabajo en un medio que es la televisión, que es la imagen y que tiene que a la vez que gustar a la gente. Yo creo que gustar e informar no es incompatible, que hacer atractiva una cosa e informar no es incompatible. Que luego venga el purista y lo haga de forma pura a ver si también gusta.

Esas piezas e información cultural son solo para gente entendida o para todo público
Pienso en cada espectador, pienso como si la pieza fuera para un solo espectador. No es ni excesivamente culto ni que no entienda de la materia. Yo intento que al final de la pieza alguien conozca algo que no conocía, conozca una fecha, un cuadro, un dato, una mirada de una fotografía, un fotógrafo, una película, un matiz de una película y con eso me conformo. En un minuto y pico de televisión tampoco puedes aspirar a dar las claves de la historia de la humanidad. Yo con dar una pequeña pincelada de algo y que llegue al espectador me conformo. Cada pieza la hago pensando en que estoy hablándole directamente al espectador, no a una masa que no se quienes son ni que hacen. Yo hago las piezas pensando en que la gente las ve, las escucha y que presta, incluso, atención.

¿Ese minuto y medio del que me habla es difícil conseguirlo en el Telediario de TVE? ¿Qué tan complicado es hacerse con minutos para la cultura en televisión?
Nosotros estamos en un medio que es Televisión Española que por suerte tiene cabida casi todo y sabemos que la cultura es una de las parcelas importantes de la vida de la gente y como tal se refleja en los minutos de telediario que se le dedica, probablemente el mayor hueco que tiene entre todos los informativos de este país y eso la audiencia lo sabe. Nosotros sabemos que la cultura a veces no bate records de audiencia pero da igual, podemos pagar el peaje de no saber que podría funcionar la cosa con otros temas pero preferimos la calidad siempre a una cantidad a cualquier precio. 

¿Eso de ser el más visto le impone algo?
No, yo por lo menos haría igual las cosas si fuera el vigesimocuarto de la lista de los más vistos. Yo de hecho he estado también en programas como la 2 Noticias sabiendo que nos veía una sexta parte del Telediario. A pesar de ello, tenía mucha repercusión todo lo que hacíamos hasta el punto de que teníamos entrevistas en directo y cualquier personaje de la cultura quería venir, te llamaban para venir  sabiendo que lo veía mucha menos gente que cualquier otro informativo. Yo hacia las cosas como si las vieran 10 millones de personas aunque las vieran medio millón, no influye para nada. Si te fijas en eso te terminas obsesionando. 

Hablemos de sus rivales, ¿Cómo cree que están tratando las otras cadenas la información cultural?
La información cultural en los informativos existe gracias a Televisión Española. Cada empresa tiene sus objetivos y el nuestro es el objetivo del servicio público y si encima somos líderes de audiencia mejor. Nosotros tenemos las dos cosas luego a lo mejor es que acertamos ofreciendo los temas que ofrecemos. Básicamente, que salga un libro, una exposición de arte o un grupo de música diferente si sale, sale en un Telediario de TVE. Los demás están sujetos a otras “esclavitudes” de mirar más otro tipo de cosas y, es más, no diría menos cultura sino diría más magacines. Es otro tipo de cultura. Gran parte de la cultura de informativos subsiste gracias a Televisión Española. 

La información sobre sociedad, espectáculos que otras cadenas realizan puede verse orientada al circo, la telebasura que podemos llamar…
No, yo no llegaría tan lejos…

No cree que dichos programas estén perjudicando la visión que tenemos en torno a la información cultural.
Yo me fijo solo en los informativos, hay muchos programas que no veo. En los informativos todas las cadenas tienen unas redacciones estupendas que hacen muy bien su trabajo pero cuyas líneas editoriales son distintas. Nosotros, como el primer mandamiento es un servicio público, tenemos otra línea y sabemos que hay atajos para conseguir más audiencia pero no los utilizamos porque creemos en lo que hacemos, creemos que un día hay que dar la exposición de Goya, otro hay que dar un libro de cualquier escritor que a lo mejor en otra cadena no entraría salvo que sea el libro de “Harry Potter”. Ellos hacen otro tipo de informativo.

Usted por ejemplo se encuentra con algún reportero de estos programas en estrenos, festivales, etc. 
Sí, claro que me los encuentro.

La información que dan es distinta…
Cada uno sabe el programa para el que trabaja. Yo trabajo con informaciones atractivas, instructivas informando sobre todo. Lo que decíamos de los puristas que muchas veces se pelean con lo atractivo, ven cuatro imágenes seguidas o una entradilla diferente y a lo mejor esa entradilla dice lo mismo que dirían ellos de la forma más pura posible. Pero no, yo me encuentro con reporteros y cada uno hace su trabajo con el objetivo de ser los mejores.

Con 30 y pico años y Jefe de Cultura de TVE, ¿Se cree un afortunado en tiempos de crisis?
Claro, me considero un afortunado desde el mismo momento en que pise esta redacción. Me considero afortunado por cómo me dejan trabajar y la forma en la que me dejan trabajar, los temas que me dejan hacer, como me dan total libertad para a veces incluso equivocarme en los enfoques por que sean demasiado arriesgados o no. Pero siempre me han dejado tanta libertad que solo se puede estar agradecido. Ahora soy prácticamente un veterano aquí en la redacción del Telediario pero sigo teniendo la ilusión del primer día.

Un gobierno sin Ministerio de Cultura, ¿Es para preocuparnos?
Depende. Me da igual que sea Ministerio de Cultura que Ministerio de Educación, Cultura y Deportes. Si dentro del Ministerio que tenemos ahora hay una Secretaria y hay un especial cariño a la cultura pues bienvenido sea. A mí me da igual como se llame mientras la cultura siempre siga siendo uno de los valores fundamentales de este país, un país tan sumamente rico en cultura. El epígrafe me da un poco igual, lo que me importa es la relevancia que se le da a la parcela cultural.

A la parcela cultural puede que se le esté dando relevancia pero TVE está ahora en el punto de mira: recortes, cierres, etc.
Televisión Española siempre ha estado en el punto de mira. Que te vea mucha gente, tener mucha presencia en la sociedad siempre te hace estar en el punto de mira. Los recortes todavía no los conocemos, falta que se aprueben los presupuestos y cuando sean cada uno hablara en consecuencia a esos recortes. Partimos de un patrimonio que es la masa profesional que hay en esta casa que es de altísimo nivel y a partir de ahí seguiremos intentando construir la televisión pública y potente que siempre se ha intentado hacer, que se hace y que la gente quiere.

La 2 Noticias… ¿Cómo fue esa experiencia en un informativo cultural?
Empecé 3,4 años en el Telediario y luego me fui a la 2 noticias. Hacíamos yo creo que el informativo más innovador que se ha hecho en los últimos 10 años en nuestro país. Estuve un año solo pero fueron 300 y pico días muy intensos, con entrevistas en directo, con 10 minutos de cultura todos los días, con otra forma de afrontar la información de sociedad, económica, nacional. Era un Late Night con gente en directo, conexiones, con deporte que se hacía de otra manera, te podría tocar por ejemplo, alguien una canción – que no es incompatible con un informativo-. La 2 Noticias es una marca consolidada que continúa de forma brillante.

De todas las entrevistas que ha hecho… ¿Con cuál se queda? Algún recuerdo especial, alguna anécdota.
Es que hay muchísimas, no sé. Ahora mismo ponía en Twitter que hoy cumpliría 106 años Francisco Ayala y yo le he entrevistado cuando cumplió 99, 100, 101, 102… y me quedo con cada una de esas entrevistas por que daba lecciones de vida y hablaba del futuro sabiendo que en realidad no había perspectiva de futuro para él sabiendo que tenía 100 años.
En Murcia he hecho muchas, al poeta Pepe Hierro, a Carlos Cano que fue una de las primeras que hice y también me encantó. Almodóvar por que le he hecho varias veces y en diferentes situaciones. Es un tipo que es un icono cultural de este país. Javier Bardem porque no hay actor probablemente como él, está entre los 5 mejores actores del mundo y es un tipo muy sencillo, muy de andar por casa con el que te entiendes muy bien. Antonio López el pintor, porque siendo un genio parece que te lo puedes encontrar por la calle y tomar un café sin que te mire desde la altura a la que está. Imagínate a la cantidad de gente que podría nombrar.

Defínase a usted mismo con 5 adjetivos y porqué
Creo que me tienen que definir otros, es mejor que me definan los demás. Como tú decías antes, hay a mucha gente que le gusta como lo hago, hay otra gente que no pero es a lo que te expones cuando haces reportajes que ven 3 millones y medio de personas: a gustar, a no gustar, a dejar indiferente, a que pasen de ti. En la vida no se puede gustar a todo el mundo porque si no te vuelves loco. Que me definan mejor, que alguien vea una pieza y me ponga adjetivos.

Gracias
Nada

Diego Guerrero, chef del Restaurante El Club Allard


Pregunta: ¿Cómo se define Diego Guerrero?

R: Soy un tío normal, trabajador, humilde. Uno no se define a sí mismo, a cada uno lo definen los demás. Uno es como es y ya luego cada uno opina.


Pregunta: ¿Lo tuyo es vocacional, ocurrencia, obligación, continuidad familiar?

R: Lo mío no es vocacional. Yo cuando hago selectividad tengo que decidir una carrera y es lo que me pongo, manos a la obra.


Pregunta: ¿La forma de trabajo cambia con estrella Michelin? ¿Y Diego?
R: No, al revés. La estrella Michelin es un reconocimiento a lo que ya vienes haciendo entonces lo que haces es seguir esa línea de trabajo. Uno tiene una línea siempre de intentar hacer las cosas cada vez mejor. Si Michelin te lo reconoces es porque entiende o se siente que lo que haces merece la pena. Es un reconocimiento a lo que ya haces pero no es nada diferente, tú no tienes que cambiar nada. Hay que ser fiel a tu estilo de trabajo.
Como persona, lo que cambia es la responsabilidad ya que la presión cada vez es mayor. Qué duda cabe que tener 2 estrellas Michelin no es lo mismo que tener una o ninguna. Todo cambia desde el punto de vista del cliente que exige más y tiene unas expectativas mayores. Mantenerte en esa línea no es fácil.
Pregunta: ¿Quién puede ser miembro del Club Allard?
R: Cualquiera. El Club Allard ya no es un club exclusivo, sino que está abierto al público en general.
Pregunta: Para mí, la cocina es algo vivo, que respira, que habla…y los que nos dedicamos a ella, tenemos que aprender a escucharla ¿Cómo es tu trabajo diario en la cocina? ¿Hay buen rollo en el equipo?
R: Si hay muy buen rollo. Estamos siempre juntos y nos llevamos todos muy bien. Es algo (el buen rollo) al que le damos mucha importancia. Nosotros somos felices haciendo lo que hacemos y es un trabajo en el que cuando metes tantas horas, tienes que tratar de ser feliz haciendo lo que haces sino no se puede aguantar. Tenemos que pasar 14 horas juntas, esto es como un Gran Hermano así que o nos llevamos bien o nos llevamos bien.
Pregunta: Crisis en la cocina ¿De qué tipo?
R: La crisis afecta a todo el mundo pero si ofreces una buena relación calidad-precio al final las cosas son caras o baratas en función de lo que te dan. Tú puedes pagar un menú de 10 euros y que sea caro porque lo que te dan tiene una calidad que se corresponde  y puedes pagar 100 euros por una comida y que sea barato ya que lo que te dan está equilibrado en cuanto a relación calidad-precio e incluso lo supera.
Nosotros lo que intentamos dar una buena relación calidad-precio donde el cliente se sienta a gusto y quiera volver. Te puedo asegurar que nuestra clientela no suele ser de un nivel adquisitivo alto: vienen parejas jóvenes, gente extranjera, etc.
Pregunta: ¿Debe la cocina regenerarse como el sistema económico o la situación político-social? Me explico, ¿Aires nuevos en el arte culinario?
R: Esto es toda una evolución pero una evolución basada en la tradición. Hay que avanzar pero no de cualquier manera sino con cimientos sólidos y eso es lo que ha hecho la cocina española. Si nuestra cocina es la número 1 en el mundo y esta a la vanguardia internacional es por eso, una cocina tradicional muy solida con la que los cocineros españoles hemos sido capaces de crear un estilo nuevo apoyados en la dieta mediterránea. Un estilo que ha calado en el mundo entero.
Pregunta: Hablemos de esa cocina nacional. España= tópicos en la cocina ¿Has trabajado en el extranjero? ¿Cómo huir de esos tópicos de tortilla, paella, etc.? ¿O realmente nos favorecen?
R: No hay que huir de nada, la tortilla y paella son platos buenísimos de aquí. Lo que tenemos que hacer es aprender a exportar las cosas como hacen los americanos, chinos o italianos. La asignatura pendiente es exportar, por ejemplo, uno de nuestros grandes valores que es la cultura del pincho como los italianos han exportado la pizza, los japonés el sushi o incluso los americanos: si ellos han sido capaces de vender la hamburguesa por todo el mundo, que nosotros no seamos capaces de vender la tapa por el mundo es algo que hay que mirar.
Pregunta: ¿Cómo ves la competencia en la restauración madrileña? ¿Hay diversidad?
R: Madrid ha cambiado mucho en estos años y afortunadamente -la restauración- es de muy buena calidad. Ahora mismo somos la Comunidad Autónoma con más restaurantes 2 estrellas Michelin en toda España, lo que es una cosa muy importante para todos. No lo veo como una competencia, sino necesaria en una capital con 5 millones de habitantes que haya una diversidad de restaurantes que nos benefician a todos ante los ciudadanos madrileños, turistas, etc.
Pregunta: Recientemente la cocina ha servido de compañía para 90 mujeres con bajos recursos en Navidad. ¿Cómo surgió ese proyecto? ¿Puede existir una cocina de alto standing y solidaria?
R: Claro, de hecho existe. Nosotros este años hemos colaborado de una manera altruista con la Fundación para el Corazón – vendiendo un libro de recetas cardiosaludables-, hemos colaborado con Solidaridad Internacional, hemos colaborado con Greenpeace llevando a cabo una cena a partir de la pesca sostenible y hemos colaborado con estas cenas para mujeres que sufren violencia de género. Los hechos demuestran que nuestra cocina puede y debe ser solidaria, cualquier profesión si tú tienes un cierto renombre hay que utilizarlo para fines buenos y qué duda cabe que eso es bueno para todos.
Pregunta: ¿Qué le dirías a aquellos jóvenes que quieren hacerse un hueco en la profesión culinaria?
R: Les diría que ante todo amen esta profesión y que tengan paciencia. Hacerse un hueco en esto no se consigue en dos días y es una carrera de fondo. Yo no he visto a nadie llegar rápido y  de una manera solida, lo que si he visto es a muchos llegar rápido y caer también muy rápido. Los grandes cocineros son modelos a seguir por eso, porque han sabido estar en un sitio, han sabido hacer las cosas bien, tranquilos y no esperando un premio sino esperando la recompensa diaria del propio cliente: que te sonría, que este contento, que te agradezca lo que le has dado de comer y que te de la enhorabuena. A partir de ahí, cliente a cliente, si tienen que llegar los reconocimientos pues llegaran y si no hay que seguir trabajando. Pero, ante todo, pensar en el día a día y estar a gusto en el día a día.


Juanjo Artero, actor

Juan Carlos: ¿Qué tal Juanjo?

J. A:  Muy bien, aquí andamos.


Juan Carlos: Reciente premio Protagonistas por “haber demostrado ser un actor indispensable en las series televisivas”, ¿Qué se siente volver a ser reconocido tras éxitos de antaño como Verano Azul?

J. A: La verdad es que es un premio muy importante y a mí me ha sentado muy bien y me ha encantado recibirlo. Agradezco que lo hayan dicho pero por supuesto que no me creo imprescindible, porque si yo me muero se seguirán haciendo series . He tenido la suerte de estar en tres grandes series de la televisión española y es suerte -insiste- porque seguro que esas series con otros actores hubieran funcionado igual. Pero el hecho de estar ahí, de que te lo reconozcan después de 30 años me llena de orgullo y satisfacción.


Juan Carlos: ¿Cómo han cambiado las producciones televisivas de aquella época a la actualidad? ¿Se está haciendo buena televisión en nuestro país?

J. A: Yo creo que antes se hacía muy buena televisión y ahora ha cambiado y se está haciendo muy buena televisión. Se rueda en cine, se graba en video, surge el sonido directo por tanto hay más posibilidades técnicas para que salga más barato el producto. Hay más calidad de televisión, más y mejor gente preparada para hacer televisión y el lenguaje de televisión ha cambiado desde las series que se hacían antes a las de ahora.
Juan Carlos: En el Barco trabajas con estrellas juveniles como Mario Casas y no tan juveniles como Belén Rueda ¿Qué te aporta este viaje en un Barco tan dispar?
J. A: Tanto de Mario, que es más joven y es un ídolo de masas una persona joven pero con gran experiencia, como de Belén se aprende. Pero no solo de ellos sino de cualquier compañero como Javier -Hernández-. Yo creo que hay que ir chupando hasta de la niña de 6 años que te puede enseñar muchas cosas. Trabajar con gente buena siempre  hace que tu trabajo sea mejor porque te sirven la frase mejor que es lo que siempre digo. No se trata de una competición ya que jugamos todos en un mismo equipo.
Juan Carlos: ¿Te preocupa la audiencia?
J. A: Claro que si. A todo el mundo le preocupa la audiencia sino la serie se va al garete y (dicho trabajo ) no deja de ser la economía personal. Con la que está cayendo es una alegría enorme tener audiencia en tu trabajo.
Juan Carlos:Te pregunto esto porque delante tienes a una gran serie como Cuéntame en TVE ¿En el equipo se busca conseguir un público diferente al de la serie de la pública o atraer al mismo público?
J. A: No, yo creo que tenemos un público común. Lo bueno es que hemos estado compitiendo ahí juntos y aguantamos los dos. Me alegro mucho de que haya dos series y dos maquinarias de producción y dos equipos de televisión y actores trabajando y viviendo de esto. Aunque sea otra cadena y otra empresa le deseo que le vaya muy bien. La competición: pues si nos llevamos el público de ellos pues será con todo el respeto y sabiendo que estamos compitiendo quizá con un público muy común otro no, pero hay mucha gente que compartimos y estamos sobreviviendo las dos series.
Hablemos de tu nueva obra teatral:

Juan Carlos: ¿Cómo ves adentrarte en un proyecto teatral en estos tiempos de crisis? ¿Influye esta complicada situación en el teatro?
J. A: Yo creo que sí, que se nota un poco. El teatro no ha muerto y por otro lado seguro que con la crisis van pasando cosas a otro nivel. Porque también con la crisis y la carencia surge mucha genialidad de alguna manera. De no tener dinero tienes que estrujar el cerebro y a lo mejor teniendo dinero te lo estrujas menos por tanto la dificultad a nivel creativo yo creo que puede ser beneficiosa. Pero yo si vengo observando una bajada de público, a nosotros no nos va mal y nos mantenemos, pero sí noto una bajada en general no solo por el público sino por el número de los espectáculos junto a opiniones que me cuentan de 2 años para adelante más o menos otros compañeros .
Juan Carlos: ¿Por qué situar la obra en un karaoke?
J. A: Eso es cosa del autor. Pero yo creo que el karaoke – situado en los bajos de la calle como los personajes en un momento-  es un sitio que es perfecto para este tipo de personajes porque ellos (los creadores) observaron  en los karaokes a solitarios que tomaban un refresco mientras esperaban el turno de su canción y luego cantaban ellos solos cuando lo normal en un karaoke es ir con amigos para pasártelo bien, reírte y cachondearte. Por tanto, se refiere mucho a personajes solitarios que es lo que somos de alguna forma.
Juan Carlos:¿Es cierta ese rumor de que hacer comedia es más complicado que hacer un drama? ¿Qué piensas cuando en una escena que en teoría se tiene que reír el público no se ríe nadie?
J. A: No pasa nada. A ver, si por ejemplo hay gente que en todas las funciones no se ríe pues te extraña pero realmente la gente no sabe cuando tiene que reírse con lo cual no es una preocupación. El publico hay veces que se ríe y otras que no y te preguntas ¿por qué no? y se debe a diversos motivos como alguna pausa, el ritmo, decirlo desde un sitio o de otro.
Juan Carlos:¿Influye que el público sea de un lugar o de otro?
J. A: Si, el público influye y sobre todo el día en que vengan. Entre semana la gente trabaja, mientras que el público que viene el domingo suele venir descansado y es a las 7 de la tarde, más pronto. El público de primera hora del sábado está más despierto, por la noche a lo mejor te encuentras a un señor medio dormido que fue a la obra obligado por su mujer (risas) ya que ha madrugado para ir al teatro.
Juan Carlos: ¿Un actor de teatro nace o se hace? ¿Qué consejos darías a los jóvenes que quieren dedicarse a la interpretación?
J. A: Les diría que se preparen, que se apunten a escuelas. Se aprende al principio y trabajando, pero como hay que empezar es en las escuelas. Cuanta más preparación tengan en todos los sentidos mucho mejor: dramático, expresión corporal, danza, clásica, voz, baile. Estudiar clásico o flamenco por ejemplo es vital ya que nunca se sabe el personaje que vas a interpretar.
Juan Carlos: ¿Qué te queda por interpretar en el teatro y en la televisión? ¿Te gustaría ponerte en la piel de algún personaje en especial?
J. A: Se me va pasando el arroz pero, por ejemplo,  me gusta mucho Shakespeare y he hecho solo Romeo y Julieta por lo que me gustaría hacer un Hamlet, pero tampoco pasa nada. Seguro que el personaje que te queda por hacer ni lo conoces. Marco Antonio de Julio Cesar también me encantaría.
 Y finalmente unas curiosidades:
Juan Carlos: Un personaje público…
Con quién te irías a un Karaoke a pasar la tarde: con Zapatero y Rajoy, me iría con los dos a hacer el ridículo todos que es muy sano.
A quién  le cantarías las 40: a quienes nos han metido en la crisis, a los que están enriquecidos y muriéndose de risa y llevándose beneficios en un momento de crisis. Les dedicaría la canción que decía «váyase usted a la mierda, ahí se pudra con su dinero», «los ricos también mueren» o «nos vemos en el infierno.
Juan Carlos: Muchas Gracias Juanjo
J. A: A ti, Juan Carlos.




Carlos Martínez Gorriarán, número 2 de Madrid al Congreso por los Diputados por UPYD y Alvaro Pombo, cabeza de lista al Senado por Madrid representando a UPYD

Entrevistador: ¿Qué es para usted UPYD y porqué embarcarse en este proyecto en un país eminentemente bipartidista?


C.M.G: Bueno, es un proyecto que fundamos precisamente para oponernos a un bipartidismo que ya hace muchos años se vio que estaba convirtiéndose en un sistema absolutamente rígido, rancio y que vivía del Estado en lugar de gobernar el Estado. Es así como llegamos a la conclusión de que los partidos tradicionales se habían convertido en partidos viejos y que no había nada que hacer con ellos y que era imposible esperar de PSOE y PP una política distinta a la que estaban haciendo. Por eso fundamos UPYD, para hacer esa política.


A.P: Primeramente porque hay que romper el bipartidismo. Es algo -el bipartidismo- muy peligroso y da lugar a posturas políticas sedentarias y poco criticas. Hay una serie de bloques del PSOE y bloques del PP y eso es muy malo porque no hay democracia sin política, hay que hacer política, todos tenemos que hacer política a los niveles que sean. Yo estoy en UPYD porque me parece un partido joven y lleno de energía alternativa.


Entrevistador: Se considera un partido de izquierdas, de derechas, de centro… ¿Cuál es la ideología de UPYD?


C.M.G: UPYD es un partido transversal. Eso significa que aquí hay personas que tienen ideas particulares sobre muchas cuestiones y que el partido no pide que las cambien si están de acuerdo con el proyecto político, un proyecto político que se basa en ideas y no en ideologías. Nosotros no tenemos un discurso del s. XIX como tienen el PP o PSOE de tipo liberal-conservador o supuestamente, socialdemócrata sino que proponemos ideas para dar soluciones políticas a los problemas políticos que tiene el país, somos un partido del s. XXI.


Entrevistador: Un nuevo partido para garantizar la unidad institucional y la coordinación tanto legal como fiscal del Estado de derecho. Esto se entiende como un descontento y una necesidad de regenerar. ¿Crees que es tiempo de regeneracionismo?
A.P: Sin duda, es tiempo de fijar y cerrar de una vez el sistema autonómico y arreglarlo.
Entrevistador: Hablando de gente, ¿Cree usted que las ideas de UPYD están llegando a la gente?
C.M.G: Sin duda alguna. De hecho, hace cuatro años cuando comenzamos nosotros no se hablaba de muchísimas cosas que ahora se esta hablando como, por ejemplo, de la necesidad de la independencia de la justicia, de la importancia de reformar a fondo las competencias de las Comunidades Autónomas y el Estado.
En fin, todo eso que eran ideas poco mencionadas como la insostenibilidad del estado de las Autonomías pues se han abierto paso en los últimos años de una manera impresionante.
No tiene nada de raro porque tenemos ideas que tiene muchísima gente.
Entrevistador: ¿Por qué usar el slogan de voto útil? ¿Cómo busca UPYD que el ciudadano vuelva a confiar en la política y los políticos?
C.M.G: En la política hay que confiar pero comprometiéndose con ella, no esperando a los políticos como si fueran gente de Marte y te solucione los problemas. Somos los ciudadanos los que tenemos que hacer política y en una democracia de verdad todos los ciudadanos somos política, estés en un partido o no lo estés. Nosotros insistimos en que cada voto vale porque es verdad, porque incluso en aquellas provincias donde sea  difícil  por la ley electoral obtener un escaño sin embargo ese voto si pasa del 5% dará forma a un grupo parlamentario en toda España.
A.P: Hay que ver los mitines de UPYD. Nuestro partido ofrece realmente alternativas, no ofrece voto útil. Por ejemplo, el senado me da igual que salga o que no salga. yo estoy ahí porque hago falta.
Entrevistador: Hablando de esa cámara territorial. ¿Cómo ve Alvaro Pombo el Senado en la actualidad?
A.P: No lo se. Es muy discutible y complejo el asunto. Rosa Diez cuenta que «y si es una cámara inútil», para mí si es inútil hay que quitarla.
Entrevistador: Los jóvenes son el presente y el futuro de nuestra sociedad ¿Cómo ve UPYD a la juventud y que propuestas tiene para este sector social?
C.M.G: Por una parte muy indignada con todo lo que esta ocurriendo y por otra parte quizá demasiado pasiva, yo creo que la juventud debería ser más activa en política aunque desde luego yo no me puedo quejar porque en UPYD hay mucha gente joven -creo que eso es una cosa muy llamativa- y precisamente además porque no tenemos juventudes y nuestros afiliados jóvenes tienen los mismos derechos y obligaciones que los que no son tan jóvenes.
Entrevistador: Ante el descontento generalizado de estos últimos meses sobre todo en la juventud aunque extendido a toda la sociedad española. ¿Cuál es su opinión en torno al 15M y todo este movimiento social e indignación que ha surgido?
A.P: Yo creo que estuvo bien al principio y era interesante al principio. A mi me parece que después se estropeo, porque los grupos meramente asamblearios se estropean con facilidad.
Entrevistador: Ante posibles alianzas con partidos  ¿Está en los objetivos de UPYD aliarse a nivel autonómico o nacional con otras fuerzas políticas para conseguir representación?
A.P: UPYD querrá continuar como ha sucedido en la legislatura anterior: pactar unas cosas  y otras no. Pero alianzas no conviene, no está en nuestra mente. UPYD tiene un perfil muy nítido que debe conservar.
Entrevistador: ¿Es partidario de un cambio en el sistema electoral para eliminar el bipartidismo en España
A. P: Totalmente partidario de un cambio en la Ley Electoral. Es absurdo que AMAIUR tenga 400, 000 votos y puedan tener 6 diputados y nosotros solo tengamos 2 o 3. Hay que corregirlo, sin duda.

Entrevistador: Finalmente y sin dejar a un lado  la revolución tecnológica que vivimos en esta sociedad y que resulta muy útil para partidos minoritarios, ¿Qué importancia tienen las redes sociales en una campaña electoral?
C.M.G: Tiene toda la importancia. Nosotros no hubiéramos existido si no fuera por Internet ya que hemos padecido y seguimos padeciendo el boicot de los medios de comunicación tradicionales. Nosotros de hecho nacimos a través de una plataforma digital -que se llamaba plataforma PRO- para ver si era posible tener un partido político. Donde mejor nos vemos es en Internet porque es nuestro medio natural.
A. P: Yo estoy en todas las redes sociales y creo que tienen mucha importancia en partidos como el nuestro.


Salvador Ordóñez Delgado, rector de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo

Hombre tenaz, extrovertido, dialogante, comprometido ¿Es así como se define?
Bueno, yo creo que esos son adjetivos demasiado fuertes. Soy una persona que trabaja en un tema que me encanta que es el de la Universidad -lleva 40 años de profesor- y la verdad es que desde hace 5 años estoy en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo coordinando un equipo magnifico que estamos haciendo lo que podemos por mantener una Universidad que tiene una tradición muy larga.
Catedrático de Petrología y Geoquímica. Un hombre de la Ciencia de la Tierra y el medio ambiente no habrá elegido Cantabria por casualidad para trabajar ¿Cómo llegó a su cargo de rector de la UIMP?
La verdad es que el cargo de rector es un patronato el que lo elige. Yo había dejado de ser Secretario de Estado de Universidad e Investigación, se conoce que alguien pensó en mí y me propuso. Me votaron la primera vez en el año 2006 y ahora recientemente en el año 2010 me han vuelto otra vez a votar siendo solo reelegible una vez por lo que estoy en la etapa en la cual se acaba ya. Yo quisiera seguir estos 8 años porque yo creo que la Universidad la hemos cambiado mucho: el proyecto inicial de Universidad muy vinculada a cursos cortos y actividades culturales la hemos pasado a un proyecto de universidad donde hemos integrado cursos de inmersión en idiomas, los postgrados, una apuesta muy fuerte por las nuevas tecnológicas tanto en lo que es la docencia -lo que se llama UIMP 2.0- y o bien lo que hemos llamado el plan integral informático de la casa que creo que es una actividad muy importante. Todo esto hay que rodarlo junto con una nueva plantilla, con nuevas ideas de organización que exigen ese tiempo deseando tenerlo acabado porque creo que merece la pena por el futuro de una Universidad prestigiosa y que intentamos que siga siendo.
Rector de una institución ya tradicional de verano ¿Cómo lleva eso de trabajar mientras los demás están disfrutando de las vacaciones? 
Evidentemente, el cuerpo se cansa pero el espíritu está feliz. El cuerpo se cansa porque evidentemente todos los días hay que levantarse a las 6 de la mañana, procurando hacer un poco de actividad física antes de iniciar la jornada laboral. Tenemos muchas actividades de tipo relaciones públicas y relaciones humanas además de presentación de cursos y demás. Luego hay la organización de cualquier institución y el atender unas actividades culturales que se están diversificando de una manera extraordinaria. Este año hemos alcanzado las 40 mil personas asistentes a nuestras actividades culturales siendo maravilloso con un público aquí en Santander que asiste a todo, participa en todo y sin el que no tendría sentido esto. A mí me parece que es un privilegio, más allá del cansancio físico -tomare luego unos días de vacaciones- es una satisfacción estar en una actividad cultural de esta importancia. 
Si le invitan a un Congreso o Feria internacional de instituciones universitarias ¿Cómo convencería a alguien para que venga a experimentar la UIMP? ¿Qué diferencia a la UIMP de otras universidades?
Nosotros ya tenemos actividades semejantes a otras universidades: todos nuestros postgrados son de alta calidad diseñados ex proceso para nuestra universidad. Creo que tenemos unos postgrados que están vinculados a las mejores instituciones universitarias españolas y extranjeras en cuanto a creación de conocimientos y por lo tanto interesantes.
Yo creo que con esto convencería a los alumnos para apuntarse a nuestros cursos de posgrado. Tenemos posgrado, doctorado pero luego creo que los cursos de verano son un elemento fundamental. Yo creo que lo más importante es que hacemos una renovación constante, no solo de nuestros estudiantes -muchos extranjeros-, sino también en profesores -que en una proporción importante de casi un 17% son extranjeros-, algunos cursos se imparten en inglés. En definitiva nosotros estamos pendientes de abrir lo más posible nuestra universidad de tal manera que en todo el mundo nos están pidiendo que nuestro modelo de cursos de verano lo llevemos a otros sitios. Yo le intentaría decir que se va a encontrar con un sitio donde hay una gran tradición de cursos de verano y desde luego a los que quieran estudiar español les diría que tienen el lugar más importante durante el verano para estudiar el idioma en un ambiente que nació casi con nuestra universidad desde prácticamente los años 30 se vienen haciendo cursos de verano.
Hablaba antes de la plataforma UIMP 2.0. La revolución tecnológica ha llegado a esta universidad ¿Qué importancia tienen la implantación de nuevas tecnológicas en el funcionamiento de una institución universitaria?
Yo creo que las nuevas tecnologías son en este momento una de las cuestiones a las que debemos de incorporarnos sin dudarlo. No son (las nuevas tecnológicas) las que están vigentes en este momento sino que como se decía “la utilización de estas se enmarca en la galaxia Marconi en la que nos encontramos prácticamente desde hace un siglo». Todo ha cambiado, la forma de comunicarse ha cambiado y esa forma ha afectado a muchas cosas pero evidentemente a una cuestión que es comunicación humana pura y dura que es el aprendizaje. Por lo tanto, yo creo que el aprendizaje, más allá de la gestión del conocimiento y de cualquier actividad, debe basarse en nuevas tecnologías. La forma como va a acabar esta revolución no la sabemos pero sí que es importante: nadie puede negar que el fenómeno Internet es un fenómeno universal que supera los 1000 millones de usuarios extendiéndose por todos los sitios permitiendo hacer una conversación ininterrumpida a nivel mundial. A partir de ahí todo lo que va a ocurrir está por definir pero se prevé como un éxito enorme que va a ser capaz de cambiar los conceptos anteriores. La universidad como la conocemos tiene 1000 años de historia y yo creo que el mayor cambio que ha vivido se ha dado en los últimos 100 años y relacionado con estos avances. 
Como ex Secretario de Universidades e Investigación ¿cómo ve el sistema universitario actual? ¿Cree que para dinamizarlo sería una buena iniciativa la introducción de nuevas tecnologías?
Teniendo en cuenta que el objetivo del sistema universitario es la formación de estudiantes, nuestros estudiantes son todos ya digitales por lo tanto no podremos comunicarnos con ellos, acceder a ellos, ser capaces de dar una enseñanza que no les aburra ni les haga odiar la enseñanza sin utilizar las nuevas tecnológicas.
Incluso ha variado el tipo de noticias que se dan: antes, estar una persona una hora escuchando una lección le parecía lo más normal del mundo, hoy muchos estudiantes se aburren durante una hora y yo creo que su cuerpo está presente pero su mente vuela por las galaxias, no sé si por las de Marconi (risas) pero seguro que vuelan. Por tanto, yo creo que no se puede rehacer la universidad conceptualmente sin tener en cuenta esto, más allá de las opiniones de las personas que dicen que si quita capacidad de pensar, si se lee menos en el sentido antiguo de la palabra de leer en un libro. A mí me parece que leer en una pantalla es tan bueno como puede ser leer en un libro, sin por ello despreciar los libros.
Lo que es una realidad es que tenemos una nueva generación donde no solo las palabras sino las imágenes son muy fuertes. La velocidad de adquisición de información a través de las imágenes es más fuerte que a través de las palabras. Son dos mundos, dos conceptos que se yuxtaponen pero lo que hay que resaltar es que son muy necesarias para cambiar el sistema docente las nuevas tecnologías. 
Hablemos de crisis y de universidad. ¿Cómo afecta la crisis a la UIMP? ¿Cree que la enseñanza pública está en peligro? ¿Es partidario, como dijo alguna dirigente política, de empezar a cobrar ciertas etapas educativas ante esta situación económica? ¿Cree que están justificados los recortes en esta materia?
En las crisis económicas hay que ver si hay oportunidad para redimensionar sistemas, para ver la utilidad del gasto. La verdad que no todo el gasto que se hace es adecuado, es bueno, se hace con criterios de eficiencia. A mí, en ese sentido, me parece que todo lo que pensemos está claro. Pero si hay algún aspecto en el cual no debemos disminuir los gastos o si se me permite las inversiones, es en lo que es la formación; pero no porque todo lo que hagamos este bien hecho y no haya que reconsiderar. Yo creo que, por un lado, reconsiderar lo que estamos haciendo, y por otro lado, mantener los niveles de inversión o de financiación parecidos a los que había anteriormente pero sobre todo en una dimensión que a mí me parece fundamental que enlaza con el tema de si hay que pagar o no hay que pagar: yo creo que es importante la igualdad de oportunidades, no se habla de ella pero toda persona que tenga capacidad y mérito suficiente, debe tener acceso a cualquier grado de educación independientemente de cual sea su situación económica, esto es lo fundamental. Aquellas personas que pueden pagarse sus estudios me parece muy bien pero evidentemente cuando una persona tiene capacidad y no puede pagarse sus estudios tiene que encontrar sistemas como becas, prestamos en condiciones de igualdad con cualquier ciudadano. Esto es un principio del estado del bienestar que es irrenunciable.
Toda universidad debe siempre pensar en el futuro y en modernizarse y mejorar con los años ¿En qué aspectos va a hacer hincapié la UIMP en los próximos años?
                                                                       
La UIMP lo que tiene que hacer es no dejar de estar en la vanguardia de las ideas y del pensamiento, eso tiene que ser irrenunciable. Nuestra universidad de ninguna manera puede abandonar esa línea que es tan importante de mantener, en primer lugar, si estamos hablando de nuevas tecnologías el estar siempre al día y concebida de la mejor manera posible, en segundo lugar, si vamos a actividades culturales no debe dejar de traer lo más importante, lo más moderno, lo más nuevo, lo que interese en cualquier momento, en tercer lugar, si hablamos de pensamiento, traer los mejores pensadores, los mejores filósofos, etc. En definitiva, siempre intentar estar en lo que se llama la excelencia en organización, gestión, programación y desarrollo.
Me imagino que sacar adelante este proyecto necesita de muchas manos ¿Con que apoyos cuenta la UIMP?
Esto es un equipo, humano. Lo más importante es una tradición de trabajar y funcionar que tiene esta casa, desde los que tienen posiciones más modestas a los que tienen posiciones más directivas tiene una tradición de hacer las cosas bien hechas, de cumplir, de coger y sacrificarse. Aquí durante el verano se hace una labor increíble pero durante el invierno, parece mentira, en Madrid se sigue trabajando. Si yo dijese que en este momento la programación del año que viene está prácticamente en un 80% hecha parece que no es verdad, pero es así. Se exige trabajar con tiempo de antelación si no, no se podría traer a gente de categoría mundial, a grandes personalidades de gran calidad.
Esta institución es símbolo de Cantabria ¿Se considera usted un poco cántabro? ¿Qué le debe la UIMP a Cantabria?
Yo he dicho que he ido cogiendo cariño a esta tierra, y no es difícil. Mi trabajo como científico me ha llevado a trabajar aquí -he trabajado en las minas de Reocin, en la mina de la Florida-. Conozco Cantabria de la parte de mi profesión, pero aparte soy asturiano y por lo tanto próximo a lo que sería el norte de España y confieso que tengo con Cantabria un cariño cada vez mayor. Ayer cuando llegaba a Santander desde Bilbao me sentía como volver a casa, vivo aquí en Caballerizas como todo el mundo sabe y la verdad que estoy encantado con ello. Lo de sentirse cántabro, pues yo creo que sí, que sirvo lealmente a esta región. Pero la UIMP nació aquí, nació como Universidad Internacional de Verano en Santander -así se llamaba originalmente-. Decía Pedro Salinas -primer secretario general de esta institución- «nosotros, sin la Montaña no somos nada». Eso resume todo, es Cantabria nuestro escaparate, nuestro buque insignia todos los años y desde donde se nos ve todo el año y donde toda la prensa nos escucha y nos oye desde todos los medios.
Hablábamos del programa del próximo año y de su configuración. Hay rumores de que la UIMP quiere reunir en 2012 a la mayor concentración de Premios Nobel jamás vista en una Universidad. ¿Es eso cierto? Cuéntenos un poco el proyecto. 
Esto se llama Proyecto Campus Nobel. Es un proyecto que hemos conseguido del Ministerio de Educación el régimen competitivo y en colaboración con la Universidad de Cantabria y gestionado a través de nuestra Fundación General. La idea que tenemos es intentar más que reunir a Premios Nobeles, reunir a Premios Nobeles de determinados tipos de sectores del conocimiento en relación con chavales o estudiantes en régimen competitivo y que quieran asistir a tener un encuentro con ellos. Se celebrará en Santander la primera o segunda semana del mes de junio de 2012 en la Magdalena. Yo creo que será un encuentro que inaugura un tipo de actividad que nosotros ya hacíamos, de hecho acudían ya una gran densidad de personalidad y algunos Premios Nobeles y se buscaban los mejores estudiantes. Esta casa traía a 2 estudiantes por cada Facultad del Estado Español de aquel entonces y los ponía en contacto con estas personas prominentes siendo una de las funciones importantes y esto es lo que vamos a hacer, resucitar un proyecto antiguo que ya otras Universidades desarrollan pero con nosotros será un reencuentro con algo que hacíamos ya hace 80 años.

Para finalizar, algunas preguntas de actualidad para saber la opinión de una personalidad como usted sobre asuntos que están en boca de todos.
-¿Es usted taurino? ¿Qué opina de la abolición de la fiesta taurina en Cataluña y de esta guerra entre defensores de la fiesta y anti taurinos?
Yo creo que hay que buscar un equilibrio. Yo realmente voy alguna vez a los toros, una vez al año voy a los toros. Es verdad que tiene una estética pero que hay una cuestión que es el sufrimiento de los animales y hay que tenerlo en cuenta. Yo creo que habría que buscar unas formas de compromiso entre la estética y el no sufrimiento de los animales. Creo que es una cuestión que en cierta manera preferiría que se arreglase de otra manera porque esta planteándose en unos términos que no son muy adecuados. 
Todos hemos visto con asombro una fiesta que estaban con una lanza acabando con un toro, la verdad que esto no es estética ni es nada. Sobre todo, hay que intentar por todos los medios en esto como en otras cosas, dialogar. Yo soy contrario al sufrimiento de los animales pero creo que hay una tradición, una fiesta que tiene mucho arraigo en España y yo creo que sería bueno buscar un equilibrio.
No soy taurino pero tampoco furibundamente anti taurino. Son cuestiones de las que hay que hablar, dialogar y debatir, sobre todo.
Como dirigente de una institución libre como es la UIMP. ¿Qué opina de los rumores sobre un posible fin de la banda terrorista ETA y de esta lacra que es el terrorismo en nuestro país?
Todo rumor que indique que una organización terrorista se disuelve, ETA o cualquier otra en el mundo, a mí me parece estupendo. Si además los rumores se confirman, sería lo mejor que podía pasar. Creo que la sociedad española ha vivido un tema muy complicado sobre todo a algunas personas que les ha tocado muy de cerca, esta misma casa donde estamos perdió a un rector asesinado por ETA -Ernest Lluch-. La verdad, a mí me parece que esto es una locura, una sin razón que debe acabar.
Muchas gracias y larga vida a la UIMP
Gracias a ti y yo diría que es una institución que se merece larga más allá de los que en cada momento estamos gestionándole que somos contingentes. Creo que yo y los que me han precedido junto a los que estamos ahora en la casa lo que intentamos es mantener esa imagen, esa luz, ese faro que ha sido la UIMP en momentos difíciles de la historia de nuestro país.





Miguel Ángel Aguilar, periodista de la Cadena Ser y El País

Un honor estar contigo Miguel Ángel. 
-Primeramente, una pregunta que acostumbro a hacer y que ayuda a personalizar al entrevistado a partir del propio entrevistado, ¿Quién es Miguel Ángel?
Eso lo saben mejor los demás, yo puedo decirte lo que intento ser: yo llegue al periodismo de rebote ya que había estudiado Ciencias Físicas para ser Astrónomo que era lo que se llevaba en mi familia y termine siendo periodista por avatares, por tensiones, por compromiso con la situación -estamos hablando de los años 65, 66-. Termine mi carrera de Ciencias Físicas pero enseguida me transforme en periodista, me matriculé en la Escuela Oficial de Periodismo y sobre todo, donde aprendí Periodismo fue en el Diario Madrid donde empecé  a trabajar en el año 1966 hasta que lo cerró el gobierno en el año 1971. Después estuve en Bruselas, porque aquí no había trabajado para los que habíamos estado en el Diario Madrid que quedamos ahí marcados de manera indeleble. Después de eso, conseguí enrolarme en Cambio 16, también en la agencia EFE -donde fui director- y en El País donde estuve 4 años como redactor y luego volví al cabo de 10 años, como columnista y en otros sitios, en Telecinco, en Antena 3, en la Cadena Ser, en fin, dando tumbos de un sitio para otro -como FreeLancer, como periodista más o menos independiente, como colaborador.
-¿A qué edad empezaste a trabajar y como fue el proceso hasta conseguir tu primer empleo? ¿Hiciste prácticas en algún medio…?
Empecé a trabajar cuando me acababa de matricular en la Escuela Oficial de Periodismo, en octubre del 1966. Y aprendí el periodismo, más bien, en el propio periódico porque lo que hacía en la Escuela era ir a examinarme como alumno «libre», que se decía entonces. 
-Eres famoso por tus sarcásticas columnas y opiniones en radio y prensa escrita. Te gusta hablar de actualidad de forma ocurrente, ¿Cómo eliges los temas sobre los que vas a tratar?
En la radio y en la televisión yo no elijo los temas, los temas los elige el que dirige el programa de la radio y de la televisión y mi labor es hablar de lo que ellos plantean, de los asuntos o de las cuestiones que ellos ponen a debate. Donde tengo que elegir los temas es en mis colaboraciones en prensa escrita que son en El País, en La Vanguardia, en el semanario El Siglo, en el periódico Cinco Días y en algún otro sitio a través de colaboraciones esporádicas que me piden. ¿Cómo los elijo? Pues, es una mixtura entre asuntos que están candentes y que están reclamando que te ocupes de ellos y asuntos que, sin estar candentes, a mí me parece que son relevantes, son importantes. De manera que hay que seguir la actualidad y hay que olvidarse de la actualidad, es un ten con ten: a veces, obligado por la actualidad hay que escribir unas cosas y a veces, hay que desentenderse de la actualidad para ocuparse de otros asuntos más profundos y tratarlos.
-¿A qué público va dirigido lo que escribes y qué buscas transmitir con ese análisis subjetivo e irónico de la actualidad? Porque, más que nada, eres analista y columnista y no tanto periodista de noticia, de redacción.
 Eso es. Yo creo que los que son los columnistas son más bien «inválidos civiles», son «hándicap es»- gente que no está útil para estar en primera línea- aunque a mí me gusta estar en primera línea, a mí me gusta participar de los acontecimientos, a mí me gusta estar presentes en ellos, a mí me gusta escribir desde un conocimiento directo de los temas. Eso no se puede hacer siempre y además escribiendo con periodicidad semanal ya que los asuntos que están así «más calientes» no aguantan una semana, hay que seguirlos cada día. Entonces, ¿a qué público me dirijo? Pues yo me hago una idea de cuál es la audiencia ante la que estoy hablando en la radio o en la televisión o cuál es la idea que tengo de los lectores de El País, o de La Vanguardia, o del Siglo o de Cinco Días y me intento dirigir a ellos. Si escribo, por ejemplo, para Cinco Días -que es un periódico económico- por lo general busco un asunto que tenga algún punto de tangencia con asuntos económicos, si escribo para el País -como escribo en las páginas de información nacional- busco un tema que tenga que ver con la política nacional y no me desvió a temas de económica, de cultura o de política internacional porque eso va en otras páginas. En La Vanguardia escribo desde un punto de vista más amplio ya que mi columna va en la sección de Opinión y no en la sección de España -como en El País- y entiendo que tengo ámbito para escribir de política internacional. 
-Hablamos ahora del periodismo que se hace ahora. Ante un periodismo de grandes grupos mediáticos que a su vez constituyen grandes corporaciones ¿Qué opinas de esa mercantilización del periodismo? ¿No crees que esto pueda perjudicar la independencia del periodista que pertenece a X grupo mediático? Un lector que lee El País, por ejemplo, tiende a pensar que el periodista que escribe en El País tiene cierta ideología, sigue una línea editorial. 
El periodismo ha estado mercantilizado casi siempre, pero el interés primordial de los empresarios, los editores no era mercantil, también mercantil. Lo que querían era influir, lo que gustaba más que el puro dinero era el poder. Entonces, tener un periódico, tener una emisora no era lo más rentable pero lo que daba por encima de todo era influencia: el dueño del periódico tenía una influencia muy superior a los beneficios que obtenía. Si se hacía un ranking de la gente que más ganaba, el del periódico no era el que más ganaba pero si se ponía por orden de mayor influencia social y política, el del periódico o emisora estaba arriba del todo. Entonces, había gente que lo que le gustaba era lo de los medios de comunicación y digamos que estaban contentos con no ser los que ganaban más dinero, pero ser los más influyentes -eso les compensaban-. Hay gente que lo que le compensa es al revés: lo que no quiere es ser conocida, ser vista, ser notoria y a cambio de eso llevarse el dinero calentito y hay gente que no le importa ser el que más dinero gana pero si ser el que más es tenido en cuenta. Los periódicos desde luego han querido siempre ganar dinero, ninguno ha querido perderlo. Pero luego ha venido una ola distinta que es: «Óigame, y si yo con el periódico, no solo no gano, sino que pierdo pero el periódico me da una oportunidad de ser influyente pues yo a lo mejor el dinero lo gano haciendo carreteras y lo pierdo haciendo el periódico, pero el periódico me da la oportunidad de conseguir contratos para hacer carreteras. ¿Qué ha pasado?
Ha pasado también que los dueños de estos medios de comunicación- primero fueron los periódicos, luego las emisoras, luego las televisiones-  se consideraron que quién mejor que ellos para ser además los propietarios de las emisoras de radio y de los canales de televisión y que les correspondía a ellos por derecho natural y divino ser los concesionarios de la radio y de la televisión, porque la diferencia entre los periódicos y la radio y tv es que en los periódicos se sigue aquello de » que cada uno haga el que le dé la gana» pero la radio y la televisión son frecuencias que son o han sido concesiones públicas del gobierno, o de los gobiernos autonómicos, o de los ayuntamientos que hacían concursos más o menos abiertos, más o menos encubiertos, más o menos apañados para entregar las frecuencias a los amigos, enemigos.. Y montaron lo que ya no era un periódico, sino un grupo mediático con su periódico, su emisora, su televisión creyendo que eso iba a ser la debacle y eso más que un éxito, ha sido en muchas ocasiones una gran ruina: que el periódico daba dinero, pero la suma del periódico, la radio y la televisión lo que ha dado es la ruina. 
-Surge además un periodismo ciudadano ante las nuevas tecnologías. ¿Cómo debe reaccionar el periodista ante esa revolución tecnológica en la que cualquier ciudadano que tenga acceso a Internet puede difundir opinión e información en su propia página web o en cualquier red social? ¿Crees que esto puede perjudicar al futuro del periodismo? En definitiva, ¿Qué opinas del periodismo ciudadano?
A mí me parece que es un fenómeno que está ahí, que hay que saber interpretar y encuadrar. Siempre el periodismo se ha hecho con testigos, la labor del periodista cuando sucedía lo que fuere en cualquier lugar era coger la grabadora -antes el blog de notas- irse allí y preguntar a la gente si habían visto lo sucedido, cómo había sido, detalles en general y contrastar con el punto de vista de los que nunca es concordante -siempre cada testigo ha visto el asunto de manera diferente- dar las distintas versiones, articularlas, hacerse una composición del lugar para contársela al lector. Ahora lo que pasa es que los testigos tienen un móvil, tienen un blog, tienen un “nose que» y lo cuentan ellos mismo y eso tiene su propia onda expansiva. Entonces, el periodista lo que tiene que hacer es lo que hacía antes: construir a partir de todo eso un relato -si en el periodismo ciudadano cada uno lo cuenta pues que lo cuente, eso no hay quien lo pare…
-El problema, según mi entender, es que utiliza esta información y no la contrasta como debería. Debido a que esa información ciudadana puede venir contaminada, yo creo que hay que defender la idea de un periodista que se vale de esa información pero que antes de utilizarla la contraste y analice minúsculamente. 
Eso se defiende por sí mismo, es inútil defenderlo o atacarlo. El que quiera beber de cianuro, que lo beba «esto es como el aceite de colza, si usted quiere utilizarlo porque es barato y resultante pero luego ha tenido su resultado negativo». Lo que se tienen que hacer es «solicitar aceite aunque sea más caro pero que esté envasado bien», cada uno que se suministre como le dé la gana.
Yo creo que los periodistas siguen teniendo, para el público que sabe lo que quiere, un valor que no puede ser sustituido por ninguna persona y yo creo que eso va a seguir teniendo mucha relevancia, mucho aprecio porque el público al final quiere saber y quiere fiarse y todo eso tiene que ver con la posibilidad de comprobar que es un profesional serio, que ha depurado la noticia, que las ha contrastado, que las ha ofrecido tras analizarlas. Esa idea de algunos de «yo entro a Twitter y me cuentan la noticia más deprisa» pues enhorabuena por la prisa que se ha dado usted pero prepárese usted para lo que le viene. 
-Contar todo de una noticia, no quedarse en un titular sino siempre profundizar en el tema…
Efectivamente.
-Hablamos un poco de tu trayectoria, empezaste en prensa escrita, después pasaste a radio que compaginaste con televisión y ahora te dedicas en profundidad a la radio y a la prensa escrita. ¿En qué plataforma te sientes más cómodo? Dinos, algo de cada uno de ellos
Son distintos. Es decir, lo que exige más esfuerzo, es la prensa escrita porque consiste en ponerse delante de un papel en blanco o de una página en blanco del ordenador y pensar en lo que se escribe. La sensación que al menos yo tengo es que es un compromiso mucho mayor que lo que se dice verbalmente. Yo me considero más comprometido con lo que escribo y lleva mi firma por lo que me lleva más tiempo y reflexión. La radio, es una maravilla porque es un poco como «el balón al primer toque», te llega el balón y tienes que hacer el regate. Yo cuando voy a la radio yo no sé de qué me van a preguntar, sobre qué me van a pedir que opine, tengo que reaccionar en caliente, en directo, «al primer toque de balón». Eso por escrito es distinto ya que tengo una capacidad de elaborar, de discernir, de pensar, de buscar datos, comprobar muchas cosas antes de seguir adelante con lo que escribes mientras que la radio y la televisión son otra cosa. La radio es en esto más favorable porque como no es tu gesto, no estas siendo captado por las cámaras pues tú te puedes mover con la naturalidad muy superior que con las cámaras de televisión delante pero la televisión también te permite, te obliga a responder en directo lo que pasa es que lo que no tienes en la televisión es la capacidad de «conchabarte» con los que están en el estudio. Tu estas en la radio y le puedes dar un golpe con el codo al de a lado o pasar un papel por escrito pero en la televisión no puedes hacer esto.
-Hablando de televisión, actualmente colaboras en Telecinco con Ana Rosa Quintana ¿Qué opinas de ciertos contenidos de televisión -con protagonismo en programas como el de Ana Rosa- que pueden dañar la imagen de la información y que a veces se compara con el periodismo social, político, cultural, etc.? ¿Qué opinas en definitiva del «periodismo de corazón? ¿Estás a favor o en contra de que se haga ese periodismo? ¿Cómo colaborador de esa cadena no te ves en ocasiones «contaminado» por esos contenidos que en el mismo programa en el que colaboras se abordan de forma no tan profesional?
Pues mira, yo tengo la peor opinión de ese periodismo. Creo que no es periodismo, creo que es lo contrario. Pero yo acudo ahí y lo que procuro es contaminarme lo menos posible. Antes, esa parte política del programa se hacía a última hora (1 y media) y ahora se hace a primera hora, a las 9 de la mañana y luego ya se desencadena todo lo demás.
Yo nunca he coincidido con Belén Esteban, con el Conde Lecquio o con «su abuela», yo estoy ahí con dos o tres periodistas que son también, digamos, del ámbito del periodismo político con los que discutimos asuntos de actualidad. Cuando han sacado alguna vez un tema de sucesos, por ejemplo, yo he guardado un respetuoso silencio y no me he pronunciado sobre esos asuntos. Pero en fin, algún «purista» podría decir «oiga pero usted está en el programa» y yo le diría sí, estoy en el programa -no en la hora de la bronca esta del corazón- pero si estoy ahí, si usted quiere condenarme pues condéneme. 
-Claro, se intentan hacer programas que incluyan todo tipo de contenidos y a veces, no concuerda una sección con otra e incluso el contraste es curioso, pero hay cabida para todo, sin duda.
Yo procuro llegar a una hora distinta, aunque sea dentro del mismo asunto y deslindarme de ese contenido.
-Sabemos que eres asiduo a Cantabria, a nuestra región. ¿Cuál es tu visión de ese periodismo que se hace en las comunidades, ese periodismo regional? ¿Crees que va a continuar o en un futuro se controlará y realizará la información desde las grandes ciudades como Madrid o Barcelona? La crisis puede afectar a los Centros Territoriales, a la prensa regional…
La prensa regional no habrá quien la mueva, porque hace falta y se ve. El que quiere vender una vaca, el que quiere poner un recordatorio de un pariente que se ha muerto, etc. lo tiene que hacer en un periódico de aquí. Lo que sería bueno en Cantabria, es que no quedará todo reducido a un periódico y que por lo menos hubiera dos que se compensen ya que el monopolio siempre es muy malo en cualquier aspecto que exista. Pero vamos, la prensa regional, frente a otras prensas que pueden entrar en crisis, yo soy de los que pienso que se va a mantener muy bien, sin problemas especiales y seguirá ganando dinero e influyendo mucho. En cuanto a la televisión regional/autonómica, ¿Qué va a pasar con la televisión? Tendría bastante más sentido esto que has hablado de los Centros Regionales de TVE. Las televisiones autonómicas se han convertido en un desastre desde el punto de vista económico y se han convertido en lo que ha dejado de ser TVE. Televisión Española fue durante muchos años el servicio doméstico del gobierno de turno, afortunadamente en la época de Zapatero eso ha dejado de ser un desastre y TVE ha dejado de ser ese servicio doméstico del gobierno convirtiéndose en una televisión neutralizada, que no hace las cosas que hacía en la época de José Antonio Sánchez y de Alfredo Urdaci, que era lo que se hacía también en la época del PSOE anterior con un cierto nivel de sectarismo. Sin embargo, en las autonómicas eso se mantiene y la televisión autonómica de Valencia es un escándalo pero la televisión autonómica de Andalucía es otro escándalo porque son tira levitas del gobierno que está al frente. 
-Hablamos del periodismo europeo, como responsable en España de la Asociación de Periodistas Europeos ¿Cómo ven en Europa el periodismo que se hace en España? 
Habría que preguntárselo a ellos. Hay algunos medios que tienen prestigio que seguramente lo están empezando a perder pero que lo han tenido como ha sido el diario El País, entre otros.
Hay otros medios que no tenían prestigio sino que más bien estaban considerados medios gubernamentales sin importar el color del gobierno, como Televisión Española, como es el caso de las Televisiones Autonómicas. En general, el periodismo español ha dado un paso de gigante por ejemplo, si hablamos de la primavera árabe hay periodistas ingleses, francés y… españoles. Los españoles están haciendo periodismo de primera línea, en cualquier punto del mundo donde haya un conflicto, donde haya una noticia están los periodistas españoles cubriendo la información para medios españoles.
Esto antes no pasaba, los periodistas españoles solo estaban en España y no había voluntad de mandarlos y lo que medios como la agencia EFE hacían era refrito de las agencias americanas. Los periodistas españoles están donde hay que estar, muchas veces en precario, pero están.
-Hablemos del caso Murdoch, también hablando del caso Wikileaks, ¿Crees que se está haciendo un periodismo del todo vale, de publicar lo que cada medio recibe sin escrúpulos? ¿Crees que se sigue buscando contrastar la información y publicar lo que de verdad interesa o se está informando sin sesgo informativo?
Se están haciendo las dos cosas. Hay quien hace el todo vale, hay quien hace el vale sobre todo lo que me ayuda para vender más y ser más influyente y por contrario, hay quien está haciendo el periodismo del contraste, de la verdad o de la aproximación a la verdad ya que de la verdad objetiva «nos enteraremos después del juicio final» pero mientras tanto hay que aproximarse a ella con diligencia, con solvencia, con rigor. Esto se representa en ejemplos como la diferencia entre el News of the World -de Rupert Murdoch- y The Guardian que es quien ha levantado esta historia o la diferencia entre la CNN o la cadena Fox News del sr. Murdoch, también. Conviven las dos versiones, los sinvergüenzas y prósperos con gente que entiende este asunto como un servicio público. Sobre Wikileaks, se trata de una práctica tan antigua como el Génesis. De las revelaciones y las cosas que no se quieren contar en público y que acaban contándose ha vivido la prensa toda la vida. ¿Qué añade Wikileaks? Pues que antes para copiar una cosa un espía se pasaba una semana en el despacho de un Embajador copiando con una plumilla o haciendo unas fotos y ahora resulta que en un pen drive se puede llevar lo que no está escrito. El problema es que todo ese material inmenso lo pones en Internet y es como si no hubieras puesto nada. Por eso, J. Assange -responsable de Wikileaks- lo que hizo fue escoger cuatro periódicos y darles el material para que ellos hicieran después el contraste, la depuración y de ahí sacaran lo que puede interesar al público ya que muchas veces la mejor manera de desinformar es inundar.
-Hablamos un poco de actualidad, ¿Qué opinión tienes del movimiento 15M que ha surgido estos últimos meses y de los enfrentamientos que se sucedieron en Londres? ¿Crees que movimientos revolucionarios como el 15M pueden afectar al resultado de las próximas elecciones? ¿Crees que los políticos tienen cierto temor a que los ciudadanos no acudan a las urnas?
Los políticos tienen temor a todo, son gente temerosa. Siempre se ha visto gente descontenta, el descontento existe desde que existe el mundo.
 El 15M está muy bien, son gente que piensan distinto, que no se sienten representadas, que están en el paro y lo han llevado bastante bien en el sentido de ser un movimiento pacífico a diferencia de lo que hemos visto en Inglaterra o hace unos años en Francia. Hay que felicitarse del grado de civilización de nuestros indignados, realmente han dado un espectáculo admirable. ¿Qué pasa? Pues lo que dijo el Premio Nobel de Economía, Joseph Stiglitz:» lo que tienen que hacer ahora estos señores son propuestas concretas y establecer un liderazgo visible». Es decir, el magma este informe sirve para un trimestre pero luego no sirve.
-Entonces, serías partidario de que se constituyan en un partido político…
Que hagan lo que les dé la gana pero, si quieren influir, tendrán que identificarse, tendrán que estructurarse. El régimen asambleario funciona un poco en el arranque pero luego nada. Hay que saber quiénes son, donde están, como se organizan, como se han elegido, a quien representan porque es que sino este asunto no prospera.
-Hablemos del futuro de la profesión, ¿Crees que el sistema educativo es el idóneo para formar a nuevos profesionales? ¿Qué crees que se debería enseñar en la actualidad a los futuros profesionales?
No sé lo que se enseña, de manera que no estoy en condiciones de hacer una propuesta alternativa. Yo he ido a las facultades de Periodismo muy pocas veces, cuando me han invitado. La Facultadde Periodismo nació a partir de una especie de obsesión porque había que ser universitarios, pues ya lo son. El problema es que las Facultades para consolidarse necesitan tiempo, historia. El periodismo está hecho un poco con material de derribo, en el origen en las facultades -ojo, que no sé cómo sea ahora-. Uno que no valía para estudiar Derecho o Economía se buscaba un acomodo en la Facultadde Periodismo porque era más fácil y con ese material de derribo se ha empezado. Ha habido dos formas de pensar: el periodismo convertido en una carrera desde el año 1 hasta el año 5 y otro sistema que otorgaba a cualquier licenciado- con dos años más de estudio- un postgrado y un baño del esto que es «periodismo» pero que exige traer ya un conocimiento previo obtenido de otra Facultad. Esto último me hubiera parecido más razonable que estudiar desde el año 1 hasta el año 5 de carrera, pero bueno, se ha hecho así y no es el resultado, lo que está saliendo. Yo creo que ha habido problemas en el sentido de que se han preparado comunicólogos más que periodistas. 
-Realmente, el problema que hay ahora es de Facultades muy masificadas que buscan cada vez menos la excelencia en el ámbito periodístico – que es el que a mí me atañe-. Por lo que una solución sería reducir el número de facultades y con ello de estudiantes de Periodismo ya que muchos de ellos se licencian sin ningún tipo de posibilidad de empleo. 
En mi época, lo que había era la Escuela de Periodismo que para más escarnio estaba en la parte de atrás del Ministerio de Información y Turismo y por otro lado estaba la Escuela de Periodismo de la Iglesia que era una cosa que habían montado en el Colegio Mayor Pio XII, el CEU.
Luego empezó ya en esa época el Estudio General de Navarra que era el precedente de la Universidad de Navarra y luego ya se han ido instaurado numerosas facultades. Eso de reducir facultades lo que no se puede hacer es por decreto. Es una desmesura en general el número de universidades que hay en España. El ministro de Educación nos dijo un día: «sería más barato coger todos los estudiantes de algunas universidades españolas y llevarlos a Harvard y pagarles la carrera allí que sostener algunas de las universidades españolas cuya organización y mantenimiento cuestan un disparate y no hay número de alumnos para hacer semejante dispendio». Con las facultades de Periodismo pasa exactamente igual, pero eso hay que dejar que el tiempo y el desastre haga su labor y la gente se convenza que aquí lo que hay que hacer es reducir este disparate.
-Cambiando de tema. Cuéntanos alguna anécdota que recuerdes de tus años como profesional. 
Una vez me acuerdo muy bien de un político que me cogió por banda en el Congreso de los Diputados -estábamos en plena transición- y me dijo: «Miguel Ángel te voy a contar algo con la promesa que no se lo vas a contar a nadie y eso» y yo le dije no te preocupes y él me lo conto. A la semana siguiente lo volví a ver y me dijo: «Oye, no te vuelvo a contar nada» y le pregunte porqué y me dijo: «porque no lo has contado» (risas). Los políticos muchas veces te están diciendo una cosa y lo que están queriendo decirte es exactamente la contraria de la que te dicen.
-Para finalizar, te voy a nombrar personajes de actualidad, tanto de política como de sociedad. Personajes que mueven masas y opiniones y que quiero que me resumas en las primeras palabras que te vienen a la mente.


Mariano Rajoy: la duda
Alfredo Pérez Rubalcaba: el intento
Barack Obama: la pasión
Hugo Chávez: la desmesura
Pedro J. Ramírez: la ambición
Belén Esteban: el desastre

José Tomás: la excelencia absoluta



Ramón Pérez-Maura, periodista del diario ABC


Tras un coloquio con grandes personalidades latinoamericanas moderado por él mismo, se sienta delante de nosotros Ramón Pérez-Maura. Periodista por la Universidad de Navarra, con mirada sincera y voluntad dialogante, este profesional curtido desde sus estudios en la casa del diario ABC es uno de los grandes expertos en política internacional de nuestro país. Hablamos con él de sus inicios, de sus preocupaciones y de sus expectativas en torno a esta apasionante profesión de contar las cosas al mundo.

Juan Carlos: Para romper el hielo y conocerte mejor, dinos ¿cómo te defines a ti mismo?
R. Pérez-Maura: Como un periodista apasionado de esta profesión a la que he dedicado toda mi vida adulta y como un observador que intenta ser impertinente, intenta preguntar por qué algunas cosas son como son – no acepto generalmente las explicaciones más comunes- no me gustan las etiquetas que se aplican para intentar dar una explicación que muchas veces no lo es. 

Juan Carlos: ¿Qué se debería enseñar, atendiendo más al periodismo del futuro y de las nuevas tecnologías, a los futuros profesionales que quieren dedicarse al periodismo?
R. Pérez-Maura: Lo que es más importante para el periodismo es que el periodismo sea una formación universitaria. No me parece tan importante que se enseñen unas cosas u otras, lo que me parece que es muy relevante es que el periodismo este en la universidad para que los periodistas salgan con una mente estructurada como profesionales universitarios y no como un simple oficio que es lo que durante muchos años fue la transmisión de la información. A partir de ahí, en la medida en la que las carreras se tecnifican muchas veces es muy importante tener los medios técnicos para enseñar lo que hoy es día es necesario para ejercer esta profesión, pero eso es el elemento que tiene que ver con el oficio. Para mí lo importante es tener una mentalidad universitaria.

Juan Carlos: Ante un periodismo de grandes grupos mediáticos, los mismos responsables de esos grupos de medios no se dan cuenta de que unos medios y mediadores cada vez más encasillados e identificados con una corporación podrían perjudicar la parcialidad y veracidad que el periodismo debe representar
R. Pérez-Maura: Yo no creo que los grandes grupos mediáticos creen tanto condicionamiento. Yo trabajo en un grupo mediático que tiene una radio, una televisión y un diario de ámbito nacional: no he tenido una colaboración habitual en la televisión de mi grupo y si las tengo en televisiones de grupos rivales y hace años que no tengo una participación en la radio de mi grupo y si la tengo en una radio rival y yo me considero una persona de ABC, donde he desarrollado toda mi vida profesional desde que salí de la universidad. Por tanto, yo creo que eso ocurre en algunos grupos mediáticos y es cada vez más difícil de imponer, dicho lo cual en esta profesión como en cualquier otra cualquier exclusividad tiene un precio que se puede pagar por él y es por esto que los profesionales, según lo que nos paguen, podemos estar en un sitio u en otro. Dicho eso, ¿estar en un grupo u en otro te identifica de forma automática ideológicamente dónde estás? supongo que si uno tiene la suerte de escoger libremente donde quiere trabajar siempre se situará donde él se sienta más cómodo, pero es evidente que vivimos en unos tiempos en los que en esta profesión uno acaba trabajando no donde quiere, sino donde puede algo que le ocurre tanto a redactores como a los que deambulan por ese singular mundo de los opinadores. Yo no creo que hoy en día se identifique a la gente solo por estar en un medio de comunicación. 

Juan Carlos: ¿Nos puedes decir brevemente algo del periodismo de ayer, del periodismo de hoy y del que será el periodismo del futuro?
R. Pérez-Maura: El periodismo de ayer fue un periodismo esencialmente de información, el periodismo de hoy es un periodismo que pide mucho más análisis y mucha más explicación además de la información y creo que estamos encaminados hacia un periodismo que a estos dos elementos de información y análisis añada la introspección – el intentar ser capaces de prevenir- que creo que es lo más difícil de todo porque obviamente explicar lo que ha ocurrido es extremadamente sencillo comparado con pretender saber qué es lo que va a venir. Lo que pasa es que vivimos en una sociedad en la que nuestros clientes, que son los que compran los medios de comunicación o los ven o los utilizan, cada día nos piden más y es cada vez más difícil ser capaces de atender a la demanda que nos están haciendo.

Juan Carlos: Especializado en información internacional, ¿No cree que cada vez haya menos información internacional y, si es así, a qué se debe?
R. Pérez-Maura: En los medios españoles en este momento se debe sobre todo a algo muy elemental que es la crisis económica. La información internacional es la información más cara de producir de todas y es al mismo tiempo una información que tiene un seguimiento relativamente escaso frente a otros tipos de información incluso dentro de los medios de calidad. Por lo tanto, llega un momento que cuando los medios están con el agua al cuello por pura lógica buscan la proporcionalidad de coste y seguimiento y de las primeras cosas que se recortan es la información internacional que exige un despliegue muy caro. En cualquier caso, España es un país bastante singular en cuanto a seguimiento de información internacional: en los diarios españoles hay una cobertura internacional que apenas hay en ningún otro y curiosamente ese seguimiento que hay en los medios españoles a la información internacional es una pura herencia del franquismo porque en tiempos del Gral. Franco en España no había información política en los diarios y como no había información política en los diarios, los diarios lo suplían con dar información política internacional y eso se ha heredado en nuestros días y lo podemos ver todavía en que somos de los pocos países en el mundo en los que hay diarios de calidad como puede ser El País o La Vanguardia que abren el periódico con información internacional.

Juan Carlos: Para finalizar y agradecerte estos minutos, ¿Qué les diría a aquellos jóvenes que quieren hacerse un hueco en el periodismo y dedicarse a ello por vocación?
R. Pérez-Maura: Que lo más importante es la vocación. Hay que venir a este trabajo no porque yo no sabía qué es lo que quería hacer sino porque de verdad tienes una voluntad de comunicar, de difundir, de ser capaz de contar historias a los demás y que hace falta mucha vocación porque son muchas más las horas duras de trabajo que las horas con las que uno disfruta de lo que ha hecho.

Juan Carlos: Muchas gracias Ramón.
R. Pérez-Maura: A ti, Juan Carlos.

Ana Blanco, presentadora del Telediario 1 de TVE

Entrevistadores: Buenos días, Ana, un placer. Te seguimos todos los días (también en twitter [@anablanco_rtve]) y, ¡qué guapa es usted de cerca!

Ana: (risas) Muchas gracias


E: Empezaste en la radio. ¿La echas de menos? ¿Te ves volviendo a ella?

A: Me gusta mucho, sí. Hace poco me hicieron unas bromas en los 40 principales, precisamente porque yo empecé allí, y… me lo pasé muy bien. Sí, alguna vez espero que sí [vuelva].

E: ¿Qué cambio prevés tú en los telediarios en el futuro? Un cambio quizá motivado por un giro político.

A: Bueno, yo voy a mirar a largo plazo. No tengo ni idea de lo que va a pasar. Hemos conseguido algo, que es separarnos del poder, y que está muy bien. Siempre hemos estado sometidos a vigilancia, y eso es bueno;  porque todos los periodistas tenemos que procurar ser rigurosos e imparciales, o por lo menos que pelear por ello. Pienso también que el futuro va a tener que ver con las nuevas tecnologías, y cómo las redes sociales o, llamémoslo X, van a ir influyendo en nuestra vida, que al fin y al cabo están relacionadas con los informativos y la televisión.

E: ¿Qué importancia le das al lenguaje no verbal en tu papel de presentadora? Tus informativos han sido tachados de lineales y muy serios comparado con otros.

A: Yo procuro que mi cara acompañe a la noticia, pero no pienso en ello, surge de manera espontánea conforme a lo que estoy contando. Es verdad que dejo poco margen a las frivolidades pero me encanta poder sonreír. En cualquier caso trato de no abusar de mi posición porque formo parte de un gran equipo y mi opinión vale tanto como las demás.

E: ¿Qué opinión tienes de las ruedas de prensa sin preguntas?

A: Fatal. Me parece que no podemos consentirlo. Eso no es una rueda de prensa.

E: ¿Cómo viviste el 11S? ¿Qué había detrás de las cámaras? ¿Qué no se vio?

A: No se vio lo impresionados que estábamos todos, igual que estaba la gente en sus casas estaba la gente que estaba en el estudio conmigo, que eran los cámaras. Tampoco se vio como la redacción urdía tratando de obtener datos que no podíamos conseguir, porque no había información.
>>Yo cuando pienso en el 11S pienso siempre como en una pesadilla. Eso es lo que mejor define lo que sentí ese día. En algún momento pensé: ‘Igual me despierto y no es verdad’, pero… era verdad.

E: Y, para terminar, un pequeño cuestionario. La noticia que más te ha impactado:

A: Y la que más sensación de tristeza me ha dejado. El 11S. También seguida del 11M. Pero bueno, cuando empiezo a pensar en noticias tristes me cuesta quedarme con una.

E: La que más te ha sorprendido:

A: La misma

E: ¿Y alegrado?

A: Pues la última de las que me he alegrado, bueno, hay una de la que me he alegrado mucho que es el mundial de futbol, porque me lo pasé muy bien y porque tenía la ILUSIÓN de que era mucha gente la que lo estaba celebrando. También me emocionó especialmente el rescate de los mineros en Chile. Me gustó mucho. Hubo algún rescate durante el telediario que no he podido traer [al curso], pero sentí que era emocionante ver cómo esa gente había resistido y consiguió volver a la vida.

E: ¿Qué consejo nos das a la juventud?

A: Hay una cosa que os va a sonar un poco antigua, pero a mí me parece que tenéis que procurar leer. Yo creo que leyendo… cualquier cosa; no hace falta que uno se ponga a leer clásicos solamente, que están muy bien, pero hay que leer el libro de cada momento, porque en cada momento hay uno.
>>Hay veces que te lees un libro y no te gusta, y luego lo vuelves a leer y sí te gusta. Creo que los libros te ayudan a pensar, te ayudan a conocer otros mundos, te sitúan en otros ambientes, te hacen plantearte lo que piensas. Y hay que procurar que Internet no desplace la lectura. Lo combinaremos, es muy importante. Hay que leer.


Arturo Pérez, ex-combatiente americano en la 2ª Guerra Mundial


Ser veterano de una guerra mundial puede ser para unos un privilegio y para otros una deshonra del pasado. Una guerra sin sentido, como la mayoría de ellas, que puede marcar tu vida por decisión propia o por simple obligación como al protagonista de nuestra entrevista, Arturo Pérez, un veterano americano de la Segunda Guerra Mundial, que actualmente vive con su familia en México. Decisiones que ocasionan numerosas víctimas inocentes. Sobrevivir a una guerra teniendo en cuenta su dureza, podría tomarse como un milagro. Acercarse al relato de un veterano de guerra norteamericano es acercarse a un relato sincero y emotivo de un episodio que marco la historia del mundo entero.

¿En qué territorio y de qué forma participo usted en ésta guerra?


En Mayo del año 1944 cumplí 18 años de edad. En ése momento los Estados Unidos de Norteamérica estaban en guerra contra Alemania, Japón e Italia, y yo siendo ciudadano norteamericano, nacido en Texas, tuve que alistarme en el ejército norteamericano por ley. Después de un entrenamiento corto en la infantería, me mandaron a las Islas Filipinas. Primeramente embarcamos en un buque en San Francisco, California, con destino a la isla de Guadalcanal. De Guadalcanal nos unimos a un convoy de barcos y nos dirigimos a las Islas Filipinas, desembarcando en Manila en Abril del año 1945. Los japoneses habían conquistado las Islas Filipinas al inicio de la guerra, en 1942. El General MacArthur, comandante en jefe de las tropas americanas en el Pacifico, abandono las islas Filipinas diciendo -“I shall return”- o en español –regresare-. Las tropas americanas estaban en el proceso de la reconquista de las Filipinas cuando yo desembarque en Manila. Participe en la derrota del ejército Japonés en las Islas Filipinas, como miembro de la infantería del ejército norteamericano.

¿Qué hecho o suceso le marcó más?

El suceso que marcó más mi estancia en el ejército Norte Americano fue cuando nos reunieron, estando yo en ese entonces en las Islas Filipinas, para anunciar el uso de una nueva bomba que fue lanzada en Hiroshima, Japón, y la inminente terminación de la guerra. Ésta fue la bomba atómica que se uso por segunda ocasión en Nagasaki y causo la derrota y rendición de los japoneses.


¿En ningún momento temió por su vida? ¿Pasó miedo?

A los 18 años uno no piensa que algo le pueda pasar. Nunca dude que sobreviviría. Miedo, pues algo sentí, pero no influyo en mis actividades.


¿Qué intereses cree que persiguen los líderes mundiales para decidir atacar otros territorios?

El poder, para algunas personas, es lo que les hace actuar; como lo hizo Adolfo Hitler en la Segunda Guerra Mundial, creando una sensación entre los alemanes de superioridad, que se creían una raza única. En el caso de Hitler, estaba aparte trastornado. Odiaba a los judíos e hizo un intento de eliminarlos provocando el llamado Holocausto. Armó un ejercito muy poderoso que conquisto casi toda Europa, antes de ser derrotado.


¿Es difícil formar parte de un contingente destinado a una misión en el extranjero? ¿Cómo se eligen a los soldados?

En mi caso fue obligatorio el registrarse para el servicio militar al cumplir 18 años. Mi país, los Estados Unidos de Norte América, estaba en ese entonces en la Segunda Guerra Mundial. Todo el país estaba dedicado de una manera u otra a formar una potencia militar para derrotar a nuestros enemigos. Los que no estaban como militares, formaban parte de la industria que manufacturaba armas y municiones para el ejército. No es difícil formar parte de un contingente que supuestamente esta defendiendo tu patria. La mayoría pensábamos que era nuestro deber servir a la patria. Nosotros estábamos seguros que nuestra causa era justa y que el enemigo era el malo. Hay cierto lavado de cerebro en esto.


¿Piensa que puede haber una Tercera Gran Guerra Mundial que marque la historia del nuevo siglo?

Sí pienso que puede suceder una tercera guerra mundial. En estos momentos el mundo está intranquilo con la guerra de Irak, la inestabilidad del Medio Oriente y la presencia de los terroristas Musulmanes. Todo esto puede agrandarse y causar una tercera guerra mundial. Con las armas modernas, pueden provocarse muchas pérdidas humanas. Lo mejor es evitar que los conflictos lleguen a mayores.


¿Cómo era la vida de un soldado en territorio de batalla? ¿Se extraña a su familia?

En tiempo de guerra la vida en territorio extranjero es realmente muy difícil. En mi caso estábamos liberando a los filipinos de la invasión japonesa, así que fuimos recibidos por ellos con los brazos abiertos. En el frente de batalla, dormíamos en pozos que excavábamos: dos soldados en cada pozo, se tomaban turnos para dormir, habiendo por lo menos uno despierto en todo momento. Si llovía, y a veces llovía bastante, se inundaba el pozo y realmente la pasábamos mal. En estas situaciones siempre se piensa en la familia, se extraña mucho y siempre esta uno en espera de noticias de casa. Recibíamos cartas constantemente.

Y la comunicación con los habitantes. ¿Era cordial? ¿Los diferentes idiomas no impedían entenderos?
No tuvimos mucho contacto con los habitantes locales, pero lo poco que los tratamos la comunicación no era difícil, ellos hablan un poco de Español e Ingles así que nos hacíamos entender fácilmente. Aprendimos unas palabras en su idioma, el Tagalo. También me sorprendió que les gustase la música ranchera mexicana, me pedían que les cantara “Allá en el Rancho Grande”

¿Cuánto tiempo estuvo usted en territorio de batalla?
Estuve muy poco tiempo en territorio de batalla, llegue en Abril 1945 y la guerra termino en Agosto 1945. Fueron unos meses nada más.
¿Ir a una guerra te cambia la vida? ¿De qué forma?
Sí te cambia la vida, sobre todo a la edad en que estuve. Tenía yo 18 años y antes de que cumpliera los 20 había terminado la guerra. En ese corto tiempo cambio mi vida totalmente. Mi modo de pensar, de ser, de actuar cambio. Nací y fui criado en un pueblo texano de 3,000 habitantes aproximadamente. Mi último año de «highschool» lo curse en San Antonio, Texas; allí me aliste en el ejército norteamericano a los 18 años. Claro que hubo un cambio drástico en mi vida en aquel momento. Pasar de pueblerino a pertenecer al ejército más poderoso del mundo, que estaba entonces en la segunda guerra mundial, fue lo más impactante que me ha sucedido. El cambio vino al terminar la guerra, cuando seguí mis estudios en la universidad, graduándome de ingeniero y trabajando en varios países latinoamericanos.

¿Cree que los conflictos se podrían arreglar de otra manera que no fuera recurriendo a la violencia?
Sería ideal que los conflictos se resolvieran sin llegar a la violencia, pero ese es un sueño. Siempre en la historia y en la actualidad se ha recurrido a la violencia.

¿Ser veterano de guerra estadounidense tiene algún mérito o reconocimiento aun viviendo fuera de EE.UU?
Ser veterano de guerra de los Estados Unidos es reconocido dentro y fuera del país. Beneficios como servicios médicos, hospitalización etc. existen solamente dentro del país.

¿Cree que las guerras son necesarias?
No, las guerras no son necesarias, pero son inevitables. Vuelvo otra vez a la historia, donde siempre ha habido conflictos y el presente, que sigue igual.

¿Cómo te integraste en la vida civil, teniendo en cuenta que en el ejército hay miembros de todas las clases sociales?
No fue difícil reintegrarme en la vida civil después del ejército. Casi todos mis compañeros de universidad pasamos por lo mismo. El problema fue el límite de plazas en las universidades, con tantos ex-militares que decidieron seguir estudiando.

¿Conviviste con otros ejércitos?
No me toco convivir con otros ejércitos, la guerra contra Japón fue casi totalmente llevada por los Estados Unidos. Por el contrario, la guerra en Europa si fue integrada por fuerzas aliadas de varios países


Ana Pastor, periodista y directora de” Los desayunos de TVE”

-¿Quién es Ana Pastor?
Por orden, madre y a continuación periodista.
-¿Por qué decidiste ser periodista? ¿Vocación, obligación, tradición familiar?
Vocación total, creo que no podría haber sido otra cosa o si hubiera sido otra cosa no habría sido tan feliz. Estoy encantada de ser lo que he elegido ser.
-¿Cómo es el día a día en un medio de comunicación, en este caso en Televisión Española y en un programa de tal magnitud como Los Desayunos?
Es muy largo, entre 12 y 14 horas de trabajo para casi todo el equipo. Nos levantamos a las 4 de la mañana y terminamos de hacer cosas prácticamente en la media noche. Por tanto, un día muy largo y muy intenso pero creo que es gratificante. El nivel del equipo es muy alto y consigue que el público también lo valore, por eso es gratificante.
-¿Te costó mucho conseguir trabajo, llegar a tu puesto actual? ¿Estás a gusto?
Yo creo en la cultura del esfuerzo y desde luego todo lo que compensa, cuesta mucho conseguirlo. Yo llevo trabajando desde los 18 años y sé que no hubiera conseguido nada en la vida sin estar haciendo lo que me gusta hacer. No me han regalado nada, como a mucha otra tanta gente que no ha tenido tanta suerte como yo. Pero ahora desde luego estoy en el mejor programa en el que podría estar.
Hablemos de tú característico estilo al entrevistar,

-¿Por qué crees que tu forma de entrevistar es tan polémica?
No lo sé. A mí me llama la atención que preguntar sea noticia, sobre todo si el que pregunta es un periodista. A lo mejor es que los políticos no están muy acostumbrados o se les ha olvidado que ese es nuestro trabajo, yo no sé hacerlo de otra manera. Quizá la repregunta para mí sea clave y eso es quizá lo que más incomode, pero soy como soy, como aparezco en la tele y como soy en mi casa.
Tu estilo periodístico no gusta mucho a líderes políticos que se perfilan como futuros dirigentes del gobierno. Sabiendo que en las elecciones de 2012 habrá un, casi seguro, cambio político y al trabajar en una televisión publica

-¿Ves peligrar tu puesto de trabajo con el posible cambio electoral?

No pienso en eso, porque pienso en el próximo programa que quiero siempre que sea mejor que el anterior y si puede ser superarlo. Me preocupa como ciudadana y no tanto como periodista que cambie el modelo de televisión pública actual. Me preocupa como ciudadana de este país que quiere una televisión pública que ha alcanzado una cuota de independencia existente en esta época. Es la que yo conozco, la que he vivido desde dentro y es la que quiero que se mantenga.
Además hay que diferenciar las televisiones públicas de las televisiones oficiales. 
Así es, televisiones públicas son la BBC o TVE y televisiones oficiales son por ejemplo, la televisión de Libia, Siria o de cualquier otro país que las controla el gobierno. En una televisión pública los criterios deben ser solo profesionales, que se te critique o se te valore en función de tu trabajo no de cómo piensen algunos o cómo interpretan algunos que es tu ideología o tu forma de hacer trabajo en función de una ideología, que no es así. Yo soy madre y mi ideología es ser madre y nada más.
-Dinos algo a resaltar del periodismo de ayer, de hoy y del que será el periodismo del futuro. 
Del de ayer es la experiencia, el deber no es deber; los kapuscinskis, gabilondos, etc. El de hoy me gusta, es en el que yo estoy y no creo que esté muerto. Esto último lo relaciono con el futuro, creo en las nuevas generaciones, creo en vosotros y por supuesto que creo que hay esperanzas de futuro, sino no me dedicaría a esto.
-¿Qué le dirías a los estudiantes y futuros periodistas que quieren dedicarse vocacionalmente a esta profesión?
Que peleen, que no se rindan, que tengan sed, que siempre se pregunten cosas, que siempre cuestionen el poder y que también se cuestionen a ellos mismos. Creo que (cuestionarse a sí mismos) es una manera de crecer profesionalmente que no debemos dejar, como Kapuscinski que tengamos 70, 80 años.
Para finalizar, te voy a nombrar 5 personajes de actualidad, tanto de política como de sociedad. Personajes que mueven masas y opiniones y que quiero que me resumas en las primeras palabras que te vienen a la mente. 
-José Luis Rodríguez Zapatero: presidente, ahora con problemas pero que antes le ha dado más derechos sociales a este país, como a los homosexuales.
-Belén Esteban: Telecinco
-Mariano Rajoy: próximo presidente del gobierno, sin duda.
-Iñaki Gabilondo: el aita, mi padre.
-José Mourinho: soy de Mourinho, no solo del Real Madrid sino que soy de Mourinho. Me gusta que acapare la presión y que además, casi la disfrute. Veo que no le pesa tener tanta presión.
Mònica López, meteoróloga


¿Quién es Mónica López? 

Mónica López es una meteoróloga que se dedica a esto desde hace ya bastantes años, desde el año 1997, justo desde que acabe la carrera. Me encanta hacer la previsión del tiempo, me encanta hacerla en televisión, eso de explicar ciencia a un público general y amplio. Mmm, no sé qué más decirte, qué más soy. Ya está (risas)

¿Cómo y porque decidiste, tras estudiar física (una carrera tan complicada), dedicarte a la información meteorológica? 

Empecé a trabajar en esto de la meteorología porque acabe la carrera, me ofrecieron empezar en un proyecto nuevo: un canal del tiempo para Vía Digital, un canal temático de meteorología. Lo que nos pasa a todos, acabas la carrera y no sabes qué hacer con tu vida. Empecé allí y allí descubrí este mundo. La verdad es que no fue una decisión personal, fue una decisión coyuntural.

Brevemente, ¿Cómo debe ser una previsión meteorológica correcta y completa? Para aquellos interesados en ello o que se quieran dedicar a la meteorología en los medios de comunicación. 

Para una previsión meteorológica bien hecha tienes que haber mirado diferentes modelos (no vale solo quedarte con uno), tienes que saber interpretarlos y tienes que tener experiencia. La experiencia en un meteorólogo es fundamental a la hora de hacer una previsión, no es lo mismo alguien que empieza que alguien que lleva años encontrándose planos de situación una y otra vez.

¿Cuál crees que es el futuro del tiempo en TVE? ¿Habrá cambios a corto plazo? Teniendo en cuenta que la información meteorológica se ha modernizado en los últimos años. 

Nosotros a corto medio plazo pretendemos seguir incorporando cosas. De hecho, nuestro sistema permite aun mostrar más cosas distintas a lo que se hace en otros canales, con lo cual estamos en ello. Diariamente trabajamos en sacar nuevos productos, nuevas informaciones. A partir de septiembre tenemos pensado hacer algún cambio en algunas cosillas que ya iréis viendo. Por tanto, a corto/medio plazo tenemos aún muchas cosas que hacer.

Cuéntanos alguna anécdota de tu trabajo diario. 

Pues mira, te cuento. Nosotros por ejemplo a veces haciendo el pronóstico somos varias personas, estamos haciendo previsión y a veces nos jugamos dinero. Cuando uno opina una cosa y otro opina otra, apostamos y alguien después cobra, lo hacemos con dinero, pero con 50 céntimos o algo así, tampoco tanto (risas).

Muchas Gracias por atendernos. 

A vosotros.


Rosa María Calaf, periodista-corresponsal

-¿Cómo y cuándo descubre Rosa María Calaf su vocación comunicativa y decide dedicarse de lleno a este difícil oficio de contar las cosas? 

Yo primero estudié Derecho porque quería hacer carrera diplomática. Tuve la oportunidad desde muy pequeña -que en aquel entonces era muy difícil- de vivir con una familia muy viajera. Veía que el exterior era muy diferente del interior de España, era una España muy cerrada. Entonces pensé que había que hacer algo, pensé en hacer derecho y una carrera diplomática, pero en el camino me gustaba siempre mucho escribir, hablar. Mi padre era un gran lector, una persona que me hablaba muchísimo desde pequeña, era muy melómano. En mi casa había tertulias de gente que venía y le gustaba hablar. Es así como yo desde muy pequeña empecé a darme cuenta de que había que contar las cosas a los demás que no tenían la oportunidad. Primero, ya digo, pensé hacerlo como diplomática pero luego me di cuenta de que me gustaba mucho más y de que iba a poder ser más libre como periodista que en una jerarquía. Enseguida empecé a hacer periodismo en cuanto se abrió la Escuela de Periodismo en Barcelona. Termine Derecho pero enseguida empecé a darme cuenta que como periodista podría realmente hacer más la labor.
-Usted aboga por la mayor especialización en la profesión, ¿Qué se debe hacer para producir mejores periodistas?
Para empezar, creer en el periodismo, creer en la necesidad del periodismo y creer que no se puede tener una sociedad sana que sea capaz de tomar decisiones, que la afectan con conocimiento, si no está informada. Si no partimos de esa base, ¿qué periodismo vamos a hacer? El periodismo no es un negocio, el periodismo no es una mercancía, el periodismo es un servicio. Eso es lo que hay que enseñarles a todo el mundo, por supuesto a los periodistas jóvenes pero también al ciudadano. El ciudadano debe exigir información veraz y de calidad y tiene que ser consciente de que, si no está informado, va en su propio perjuicio.
-Más de 25 años en la televisión pública avalan su trayectoria y profesionalidad ¿Díganos algo de la televisión española de ayer, de hoy y del futuro?
Siempre la televisión ha sido un vehículo muy eficaz. Al principio debía ser y era bastante un vehículo de conocimiento, sin entrar en la etapa franquista en la que era un vehículo de la dictadura. En principio, la televisión nació como una herramienta de conocimiento. Con todos los cambios tecnológicos significaba que ese conocimiento iba poder llegar a más gente y que por tanto nos íbamos a conocer mejor, íbamos a saber mejor como eran los demás e íbamos a acércanos a realidades más distantes y más distintas. Algo que uno conoce puede comprenderlo más fácilmente y algo que uno comprende pues evidentemente no va a pelear contra él, es decir que iba a haber una mejoría en la cohesión social. Eso era todo lo que pensábamos que iba a dar todos estos cambios tecnológicos. Pues no los ha dado ya que la televisión, por contrario, se ha convertido en un instrumento más de espectáculo, en casi casi socia del desconocimiento. Por tanto, la televisión al inicio era mucho más tímida, una herramienta poderosa pero más contenida, seguía la línea general de los medios de transmitir información al ciudadano y servirle, y después se ha convertido en todo lo contrario. Y la del futuro, no tengo ni idea pero si sigue este camino mal va. Yo creo que lo que va a pasar es que van a acabar quedando en todo caso, canales temáticos y puntuales en los que sí se va a hacer buenos programas, y una televisión generalista basura.
-¿Qué papel tiene el periodista hoy en día en esta revolución tecnológica en la que cualquier ciudadano con un blog gratuito es capaz de crear y difundir opinión e información? En definitiva, ¿Qué opina del periodismo ciudadano?
Es muy importante que los ciudadanos puedan expresarse, pero eso no es más que la libertad de expresión de los ciudadanos, eso no es periodismo. El periodista debe filtrar y elaborar información. Por ejemplo, en la medicina puede haber mucha gente que diga remedios para el dolor de cabeza pero al final quien sabe es el médico. Lo que no puede ser es una sociedad sin periodismo y no puede haber un periodismo sin periodistas.
-¿Qué debe imperar en un periodista para diferenciarse de los demás?
Ser periodista, es decir, cumplir el objetivo para el que ha estudiado. Ten en cuenta que una profesión es más que un trabajo, es un compromiso social y una responsabilidad para hacer que las cosas vayan cada vez mejor para todo el mundo. El que haga esto, será mejor periodista que el que no lo haga.
Hablemos de su época como corresponsal…
-¿Cómo fueron sus inicios en corresponsalías como Moscú, Pekín o Nueva York?
Tenía poca experiencia cuando empecé en Nueva York por lo que tuve que aprender el ABC, es decir, cómo funciona una corresponsalía: que significa estar en permanente contacto con lo que está sucediendo, buscando fuentes, contrastando, teniendo puntos de referencia a quienes acudir cuando sucede algo para comprobar y para confirmar.
-¿Cómo es la vida de un corresponsal?
Eres como un médico de guardia, estas permanentemente al servicio de lo que sucede para tratar de contarlo. Esto es así, lo es desde el principio y lo es ahora lo que pasa es que ahora cada vez se trabajaba más deprisa y con menos profundidad.
Un corresponsal tiene que conocer la zona donde está, y poder ser capaz de reaccionar muy rápidamente y de tener todas aquellas herramientas que le permitan contrastar la información y poder transmitirla lo más adecuadamente posible y con la mayor veracidad posible.
-Cuéntenos la anécdota que mejor recuerde de estos años como profesional
Cuento una anécdota que significa muchas cosas. Me rompí el brazo en Timor -una isla pequeña al sur de Indonesia de 750 mil habitantes en la que ha habido conflictos y violencia- y no había un solo médico en todo el país. Estando varias horas con el brazo así, los únicos que me podían atender eran los militares australianos, me atendieron en el hospital de campaña que tenía, me escayolaron, me ingresaron una noche y seguí trabajando. Al cabo de tres semanas, cuando termine de trabajar allí, volví a Hong Kong y fui al traumatólogo a ver si estaba bien el brazo. El traumatólogo me quitó la escayola y cuando me fue a reponer la escayola me dio una carta de colores para que eligiera el color de la escayola -lo pedí azul-. Lo cuento porque creo que significa mucho: un mundo donde hay un lugar en el que no hay un solo médico y a menos de dos horas y hay otro en donde te dan una carta de colores para decir el color de tu escayola significa que algo funciona mal. 
Hablando de proyectos de futuro para fortalecer el periodismo…
-¿Qué opinas del nacimiento de un periódico constituido solo por periodistas como el caso de «Il Fato Quotidiano» en Italia? 
Hay de hecho una experiencia en Barcelona, que es el ARA -significa ahora- pero no es exactamente igual que Il Fato Quotidiano. El periódico italiano es absolutamente independiente, es decir, es solo periodistas y financiado con suscripción, venta en quiosco y con algo de publicidad pero no de empresas que puedan condicionar la línea del periódico. Yo creo que sería fantástico pero que hay pocas posibilidades de encontrar un ambiente y entorno social que fuera suscriptor de un proyecto de periódico que todavía no existe. Creo que sería bueno que se hiciera ese periódico pero eso significa que tiene que haber una sociedad o por lo menos un sector importante de esta que esté interesado en este tipo de prensa, porque si no a quien se lo vas a vender.
-¿Qué les diría a los jóvenes que quieren dedicarse al periodismo?
Que lo hagan, que es una profesión maravillosa y absolutamente necesaria sin la que la libertad está en peligro, ya no solo la democracia, se dice mucho «de la prensa fuerte depende una democracia fuerte» pero una democracia fuerte no es solo que se vote cada cuatro años, sino que las personas vivan democráticamente, respeten las opiniones de los demás, acepten el pluralismo. Creo que la libertad va más allá, si no hay un periodismo no puede haber una libertad y los griegos ya lo decían: «hay que elegir entre descansar y no hacer nada o seguir para conseguir la libertad, ya que ser libres cuesta une esfuerzo». Los jóvenes que quieren ser periodistas se tienen que dar cuenta que tienen esa tarea, ese compromiso de colaborar en el mantenimiento de ciudadanos libres, capaces de ejercer sus derechos y luchar contra los abusos. Ánimo absolutamente a los jóvenes pero ya digo, con ese objetivo de servicio y no de hacerse famoso o rico. 
Muchas Gracias y deseamos que el periodismo prevalezca
Pues deseo eso, porque si no nos va a ir muy mal a todos.